domingo, febrero 11, 2007

Ases calientes (Smokin' Aces), era mejor el trailer


Aquí la breve sinopsis de filmaffinity:


El jefe mafioso Primo Sparazza ofrece una generosa recompensa de un millón de dólares a quien liquide a Buddy 'Aces' Israel (Jeremy Piven), un mago de tres al cuarto que va a testificar contra la mafia de Las Vegas. El FBI ve la oportunidad de usar al embaucador para atrapar a Sparazza, y ofrece protección a Aces, al que custodiarán dos agentes (Ryan Reynolds & Ray Liotta) en su refugio de Lake Tahoe. Cuando la comunidad de malhechores presentes, pasados y futuros, se entera del precio de la cabeza de 'Aces', una multitud de cazadores de recompensas, matones, bellas y sensuales sirenas traidoras y mafiosos salen de caza. Con Lake Tahoe como objetivo, la colección de chorizos se lanza a una cómica carrera en su intento de matar a 'Aces' y llevarse el botín...


Después de sorprender a la crítica con “Narc”, un correcto thriller dramático, Carnahan vuelve a la carga con una película de acción al más puro estilo Guy Ritchie pero sin la frescura de éste. El cocktail que Carnahan nos sirve se hace insípido en algunos momentos y disfrutable en otros. La mezcla entre thriller, comedia y acción se hace bastante heterogenia, sin que ninguna de los géneros llegue a brillar con su máximo esplendor.

La presentación de todos y cada uno de los personajes es bastante informal, ya utilizada en otras películas pero bien resuelta. Ni que decir que estos personajes son de lo más estrambóticos y durante la película algunos de ellos hacen gala de sus irritables excentricidades (véase el trío nazi)


Una vez hechas las presentaciones, el ritmo de la película empieza a flaquear bastante. Si bien el principio es bastante rápido (dentro de lo que cabe, teniendo en cuenta que hay muchos personajes), lo que sigue se hace lento y monótono. Carnahan empieza a perder fluidez en la narración de un modo alarmante. Por suerte, y cuando ya empieza uno a creer que está ante una imitación barata de un film de Scorsese, la cosa empieza animarse un poco cuando el variopinto grupo de matones y caza recompensas inicia su plan de caza. En ese momento apenas hay lugar para el descanso de nuestras retinas y la acción se sucede de forma constante y bien equilibrada, alternando momentos de adrenalina pura con secuencias más explicativas.


Sin lugar a dudas, Carnahan se lo pasado bomba rodando la película que el mismo se ha escrito. Pero lo que está claro es que Carnahan no es un Tarantino (ni en lo bueno ni en lo malo), y muchos de los diálogos y situaciones de la película son verdaderamente absurdos y surrealistas. Intenta ser transgresor con lo que cuenta y el modo en que lo cuenta, pero la cosa se queda en un quiero y no puedo.

Momentos como el del niño karateka, la conversación del nazi superviviente y su verdugo o el de la mancha en la chaqueta de cuero, destilan estupidez por todos lados. En esos momentos, un servidor, más que reirse, ponía cara de “pero esto que és!?”. Las buenas escenas se entremezclan con otras que no aportan nada a la trama y que están de relleno para intentar que la espectador piense que lo que está viendo es la ostia de bueno. Pero eso a mí, almenos, no me ha pasado. Por eso pienso que en ese aspecto, a Carnahan se la ido la olla completamente. El asunto se le ha ido un poco de las manos y eso que el guión es francamente provechoso.


Donde Carnahan se luce mejor es en los momentos más trepidantes, donde la acción sucumbe a toda racionalidad (la escena de la motosierra es una prueba de ello). También algunas escenas de tensión, como varias de las que se suceden en un ascensor, están bien logradas. Estas escenas consiguen captar nuestra máxima atención y nos mete de lleno en todo el fregado que se está montando.

Y luego viene cuando realmente empezamos a dudar de las intenciones del director. Porque si hasta el momento todo había sido acción y cachondeo, en los últimos 20 minutos la cosa da un giro drástico y el dramatismo hace acto de presencia.

No es que ese dramatismo se haga molesto, simplemente es que no cuadra demasiado con el ritmo que la película llevaba.

Estos momentos están solventados de forma aceptable (como ya se hizo en Narc) tanto por el buen tratamiento que Carnahan le impregna como por las actuaciones de los actores. Aquí felicito tanto a Jeremy Piven como a Ryan Reynolds, que en su poder están los personajes más elaborados y el deber de sacar a flote toda la función que Carnahan a montado.

En el lado opuesto, tenemos a un obeso y venido a menos Andy García, que está de pena en su papel y pasa a englosar esa lista de buenos actores en horas bajas, en las que figuran nombres tan ilustres como Jeremy Irons, John Malckovich o Christopher Walken. Una pena, la verdad.

Luego está la cantante y “quiero ser actriz” Alicia Keys, que está bastante sosa, lo cual ya era de esperar. Llega un momento que uno se cansa de ver tanto artista musical intentando hacerse un hueco en Hollywood. Mejor que dejen de dar el cante y se dediquen a lo suyo.

Ray Liotta hace lo que puede con su personaje. Tampoco es que los demás personajes están mejor elaborados que el suyo, salvo destacando sus características principales, pero es que de Liotta uno se esperaba algo más.

El resto del elenco está correcto en base a lo que les ha tocado representar. También se agradece, y mucho, que la intervención de Ben Affleck sea más bien anecdótica. Verlo demasiado tiempo en esa jaula de grillos se me hubiera antojado insoportable.


Las sorpresas finales, porque las hay (como en todas las películas que se hacen ahora), están bien introducidas gracias a un guión competente y a no intentar tomar por tonto al espectador, como hacen muchos otros directores. Puede que alguna se viera a venir (almenos para mí), pero no merman el desarrollo de la historia, sinó que le dan un nuevo empuje.



Y hasta aquí mis impresiones. Realmente no se muy bien como valorar esta película. Primero me aburre y luego me distrae. Pero ese entretenimiento también se vuelve confuso cuando el equilibrio entre disparos, sangre, furcias, chistes, tacos, traiciones, persecuciones y lágrimas se va al traste por culpa de situaciones ilógicas, absurdas y sin ningún tipo de fundamento que Carnahan intenta colarnos como si fuera algo genial.


Smokin' Aces puede gustarte si tienes claro que estás contemplando una chorrada descomunal que solamente prentende entretenerte. Pero si buscas el peliculón que creías que se escondía tras el jugoso trailer, lo único que encontrarás será una decepción con mayúsculas.


Carnahan nos ha servido un truco de mágia que juega con la comicidad del espectador. Esa comicidad pende de un hilo muy fino que se puede romper si dicho espectador no se deja embaucar por los malabarismos visuales de los que Carnahan hace gala.


Por cierto, los seguidores de la serie “Perdidos” (no es mi caso) podrán ver a uno de sus actores (Matthew Fox) haciendo un breve y curioso cameo.


Lo mejor: Un guión bien estructurado aunque desaprovechado en su ejecución; unas buenas interpretaciones de Jeremy Piven y Ryan Reynolds; las escenas de acción.


Lo peor: Las situaciones absurdas que no vienen a cuento y que no aportan nada a la trama; el humor que apenas hace gracia salvo momentos puntuales; la pérdida del ritmo narrativo durante la primera mitad de la película.


Valoración personal: 2,5 sobre 5 (Regular)


7 comentarios:

Anónimo dijo...

Pensaba ver esta el viernes. No pudo ser, me pilló la gripe y estuve fatal. Bueno, que tendrá que esperar al videoclub, como otro montón que tengo pendientes. Realmente parece una película muy viva y adrenalínica. Ya veremos... el trailer es la caña.

Saludos!!

Anónimo dijo...

La verdad es que el trailer es una pasada, pero bueno deja entreveer que será una de esas películas con mucho efecto colorín y movimiento y poco de lo que importa made in tony scott. Seguramente iré a verla pero tengo bastantes pendientes en cartelera antes que esta. Un saludo y buena reseña

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Cinematic, espero que te mejores pronto ;)
Yo circulo por el mundo urbano con mi viejo vehículo a dos ruedas y soy una presa fácil para resfriados, congestiones nasales, catarros titánicos y demás molestas enfermedades febriles. Se de buena tinta lo *odido que es, así que simplemente te recomiendo mucha paciencia, sopitas caseras y cine en dvd a destajo.

Mi lista de pendientes es inmensa..Y yo te recomiendo que "Smokin' Aces" la dejes para el videoclub, por si acaso.

humanafterall, yo tb aluciné con el trailer y como ya digo en el post, es todo puro efectismo y pericia visual que luego no se ve cumplida.
Con "Smokin' Aces", Carnahan ha intentado mezclar a Scorsese, Tarantino, Guy Ritchie, Tony Scott y Michael Bay en uno sólo. El resultado: un mejunje de lo más extraño y surrealista de dura asimilación. Con todo ello, puede entretenerte o hacerte abandonar la sala con gran indignación. Depende como te pille.
Mi consejo desinteresado es que apuestes por tus otras películas pendientes y luego si eso, le das la oportunidad a ésta.

Saludos ;)

Anónimo dijo...

Creo que esta película no es de "mi estilo" aunque cuando las crítas son buenas puedo hacer un esfuerzo y ver cualquier tipo de película...Parece que me lo voy a ahorrar con Smokin' Aces!! Saludos!!;)

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Pues si no es de tu gusto, mejor no la veas ;)

A los que alucinen con la violencia gratuita les podrá gustar. A los que busquen un peliculón, les parecerá una chorrada.

Hay otras ofertas más interesantes en los que dejarse los casi 7 euros que cuesta la entrada del cine :)

Saludos ;)

Anónimo dijo...

No solo matt salen tambien otros dos actores que haya reconocido como uno de los nacis el alto fuerte que era el jefe de los mercenarios que fueron a la isla y otro de los asesinos profesionales que es el jefe de los otros en los 70.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Gracias por el apunte, anónimo.
No syo seguidor de la serie de Abrams, así que de buenas a primeras tan sólo reconocí a Matthew Fox por ser uno de sus principales protagonistas.

Saludos ;)