martes, julio 22, 2008

"Superagente 86", menos risas, mismo entretenimiento


Si las películas basadas en videojuegos suelen ser mayormente desastrosas, las que adaptan seriales de antaño desde luego no son mucho mejores.
Series de tv como “Los Vengadores”, “Los Ángeles de Charlie”, "Starsky y Hutch” o “Los hombres de Harrelson” han sido objeto de abominables adaptaciones que harían que los creadores de las susodichas se dieran de golpes contra la pared (y también sus espectadores/fans)

Superagente 86”, que es tal como se conoció en nuestro país “Get Smart”, fue una serie estadounidense de mediados de los 60 que parodiaba la figura del espía secreto- y concretamente, al famoso James Bond- con un humor cazurro e inocente. Mel Brooks, experto en parodias como “El jovencito Frankenstein” o “La loca historia de las galaxias”, creó esta exitosa serie junto a Beck Henry, y juntos hicieron reir a carcajadas a millones de espectadores durante los cinco años que duró su emisión en pantalla -sin contar las continuas reposiciones nacionales e internacionales-, contando con un estimable reparto encabezado por el inolvidable Don Adams como el despistado Superagente 86, Barbara Feldon como su eficaz compañera la Agente 99 y Edward Platt como “el Jefe” de la agencia C.O.N.T.R.O.L.

En su momento la serie ya tuvo sus pertinentes largometrajes, pero no nos extraña que dada la imperante escasez de ideas actual, Hollywood haya abierto de nuevo el baúl de los recuerdos para sacarle jugo a un producto que ahora regresa a la gran pantalla adaptándose convenientemente a los nuevos tiempos.

La agencia gubernamental “C.O.N.T.R.O.L.” ya no es tal como la conocíamos. Los tiempos han cambiado y la tecnología ha evolucionado. El zapatófono es un intrumento obsoleto si tenemos en cuenta que ahora nos comunicamos con diminutos -comparados con aquel zapatazo- teléfonos móbiles que incluso pueden usar auriculares para nuestra mayor comodidad.

Pero hay cosas que nunca cambian y la secreta agencia americana (una evidente parodia de la CIA) sigue encargándose de salvaguardar la seguridad de todo un país, intentando evitar o corregir cualquier amenaza venga ésta de dónde venga. Y por supuesto, entre sus prioridades está controlar los movimientos de la agencia enemiga K.A.O.S., que al igual que ésta, sigue activa y haciendo de las suyas.

Las dos agencias volverán a enfrentarse de nuevo cuando el despiadado Siegfried (Terence Stamp) deje fuera de juego a C.O.N.T.R.O.L., infiltrándose en su base de datos y dejando al descubierto las identidades de todos sus agentes secretos para poder así llevar a cabo una pequeña exhibición de la capacidad de destrucción que tienen sus misiles; misiles que han sido vendidos a grupos terroristas y que se activarán si el gobierno estadounidense no cumplen con sus exigencias (económicas, por supuesto)

La solución para detener los planes de Siegfried pasa por infiltrar a un nuevo agente, Max Smart alias Superagente 86 (Steve Carell), un analista de la agencia deseoso de dejar los despachos y pasar a la acción de campo. Pero Smart no estará sólo, ya que para esta arriesgada misión contará con la ayuda de la experta Agente 99 (Anne Hathaway). Juntos deberán detener a Siegfried para que no lleve a cabo su maquievélico y ambicioso proyecto.


Si pienso en la serie original y en su protagonista, no se me ocurre nadie mejor para encarnar a este nuevo Superagente 86 que el cómico Steve Carell. Su competencia está comprobada y físicamente encaja a la perfección.
Carell realiza una interpretación muy correcta del agente Maxwell Smart, mostrándose patoso y atolondrado pero siempre procurando caer simpático al espectador. El actor evita muecas innecesarias, de modo que su personaje resulta gracioso por su aparente serenidad y su innata torpeza, y no por llegar a extremos histriónicos como hacen otros cómicos.

Como la Agente 99 tenemos a Anne Hathaway, actriz a la que nunca he prestado demasiada atención hasta hoy. No sólo se desenvuelva con soltura en su papel sino que también desprende sensualidad por cada poro de su piel.
Aquí el personaje dista un poco de la ingenuidad con la que se trataba en la serie original. Ahora tenemos a una Agente 99 mucho más dominante y de armas tomar. Y si en los 60 ésta era bastante recatadita, aquí no se corta ni un pelo en aprovechar sus encantos de mujer para seducir o dejar K.O. a sus rivales (y de paso, subirle la testosterona a un servidor)

Sobre los secundarios nada que objetar, ya que todos cumplen con su rol. Desde los veteranos Alan Arkin y Terence Stamp como “El Jefe” y Seigfred”, respectivamente, hasta Dwayne Johnson (ya sin el postizo The Rock) como el Agente 23, que por mucha condición de action-man que tenga, hay que decir que el tío se defiende bastante bien delante de las cámaras (no se puede decir lo mismo de otros de su misma condición)


En general, el humor de la cinta es bastante simplón y en algunos momentos casi de parvulario (sólo faltaba una piel de plátano que propiciara el típico y desafortunado resbalón). Tira de chistes fáciles que a veces resultan efectivos y otras demasiado insulsos. Quizás por ello han decido también postar por unas buenas dosis de acción, como si de un film del propio James Bond se tratara, aunque sin su misma espectacularidad, claro. En ese aspecto, no hay nada en ella que no hayamos visto antes, pero la secuencia final está bastante conseguida, siendo realmente trepidante sin que la parte cómica se resienta.

Por tanto, “Superagente 86” no es ni más ni menos que un producto de fácil digestión con el que pasar un rato entretenido sin más, aunque quizás con hora y media hubiera bastado. Probablemente no os riais a carcajadas (me reí el triple con el panda de Dreamworks) pero quizás sí que os saque alguna risa y bastantes sonrisas, sobretodo gracias a sus guiños, que son bastantes. Considero que su humor no está a la altura de la serie original (o eso dicen mis recuerdos) pero sí se trata de una adaptación bastante decente y honrosa, que ya es decir mucho.

A los que espereis un simple entretenimiento, os parecerá una película correcta; a los que espereis que esté al nivel de la serie, quizás se os antoje un tanto floja (algunos de los mejores gags estaban en el trailer).


Lo mejor: sus protagonistas; que sea respetuosa con la serie original

Lo peor: un humor bastante tópico e infantiloide, la mayoría de veces


Valoración personal: Correcta

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi lo único que me llama de esta película es Steve Carrel, porque ni vi la serie original ni el tipo de humor que parece tener (y dices que tiene)me atrae nada, pero llevo tanto tiempo sin ir al cine que seria capaz de verla! jajaja!! A ver si pronto puedo convencer a alguien para ver alguna peli en el cine y actualizo el blog que lo tengo muy descuidado...

¡Saludos!

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Steve Carrel es el ideal para esta película.
No es que te vayas a mear de la risa con ella (xD), pero sí creo que puedes pasar un rato entretenido y a ratos bastante divertido. Dado que la película no pretende otra cosa, se puede decir que cumple con su cometido, aunque el humor sea muy facilón.

En el cine o en casa, da igual lo que veas, pero actualiza! jejeej

Saludos ;)

Jorge - cinenovedades dijo...

Siendo yo, un fanático tremendo de la serie original, temía de sobremanera que la adaptación al cine fuera desastrosa. Pero por lo que comentas, sin llegar a la calidad de la serie original (tampoco esperaba que tuviese esa calidad) estamos ante la presencia de un producto bastante decente. Coincido si contigo, en que Steve Carrell es el actor indicado para interpretar al agente Smart. En ese sentido se ha hecho una muy buena elección.
Excelente reseña! Ya te contaré que me pareció!
Saludos!

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Espero que te guste. Desde luego no esperes que esté al nivel de la serie original, pero es un film que la respeta.

Sin ser una maravilla, se las apaña bien para entretenerte con una sonrisa permanente.

Ya me contarás ;)

Saludos :)