domingo, noviembre 30, 2008

"Madagascar 2", hogar, dulce hogar


Tres años han pasado desde que se estrenara, en el 2005, “Madagascar”, una de las cintas más flojas de Dreamworks. Y es que pese a tener un buen arranque, la película iba desinflándose a medida que transcurrían los minutos, y ni sus geniales pingüinos ni la pegadiza (y machacona) canción “I Like To Move It” lograban levantar un film que transmitía, entre otros cosas, uno lamentable mensaje al espectador: ¡estar encerrado en un cómodo zoo era mejor que estar en libertad!

Ahora parece que con su secuela, sus responsables han intentando enmendar ese error garrafal, elaborando un film lleno de buenos sentimientos y amables moralejas, sin olvidarse, eso sí, de ofrecer un entretenimiento para el disfrute de los más peques de la casa. Y digo los más peques porque, a fin de cuentas, serán los que más disfruten de las “animaladas” de estos simpáticos –aunque no entrañables- personajes.


Tras acabar en una exótica isla de Madagascar, nuestros protagonistas se preparan para su viaje de vuelta a casa, Nueva York. Para ello utilizan un destartalado avión que supuestamente les llevará sin problemas a su lugar de destino. Desgraciadamente, el aparato tan sólo logra mantenerse en el aire por un breve espacio de tiempo, y pronto la tripulación debe realizar un aterrizaje de emergencia en las inmensas llanuras de África. Una vez allí, Alex, Marty, Melman Gloria, el rey Julien, Maurice y los pingüinos, tendrán un nuevo mundo ante sus ojos. Asombrados, descubrirán que no son los únicos de su especie, y también que África es, además de un hermoso lugar, su verdadero hogar.


Con un interesante prólogo, acompañado de la siempre poderosa partitura de Hans Zimmer, el inicio de esta secuela nos pone en situación con los acontecimientos transcurridos en su predecesora, sirviéndonos estos minutos de nexo para esta continuación. De nuevo tenemos a todos los personajes reunidos para alcanzar su meta: regresar al zoo. Pero tras el imprevisto aterrizaje en África, sus deseos darán un vuelco de 180 grados.

Si en la anterior película la jungla se convertía en una pesadilla para el grupo de animales protagonistas, aquí sucederá todo lo contrario. Las llanuras de África son el paraíso hecho realidad, con grandes extensiones de tierra para su disfrute y la compañía de sus semejantes. Claro que no todo serán alegrías, y cada personaje deberá aceptar su condición de no ser único, como sí ocurría en el zoo. Además, a alguno que otro, la reinserción en su hábitat natural le será algo más dificultosa de lo deseado (especialmente por estilo de vida que llevaba en la ciudad)

Durante el visionado de la película, y atendiendo especialmente al personaje principal, el león, nos damos cuenta que existen ciertos paralelismos –nada ocultos- con “El Rey León” de Disney, aunque aquí el enfoque es siempre desde un punto de vista mucho más cómico. El resto de subtramas se apoyan sobretodo en el, llamémosle, carisma de los personajes. De hecho, no deja de resultar curioso como personajes como el de Melman la jirafa o Marty la cebra, son más simpáticos y entretenidos que el propio león protagonista, cuyas payasadas difícilmente nos saquen alguna sonrisa (el recurso de los bailecitos ya no da para mucho).


Aquí no obstante, lo peor es el exceso de personajes, teniendo en cuenta que algunos de ellos parecen metidos con calzador en la historia, y cuya única razón de ser parece atender a razones de puro merchandising (línea de juguetes, tazas y peluches mucho más variada). Hay que sacarse algún as de la manga para que el rey Julien y Maurice tengan algún aporte a la trama. Y ya no hablemos de los monos o los pingüinos, que apenas pintan nada, siendo los segundos los que, pese a todo, tiene algunos de los mejores gags (al igual que en la primera entrega)


En general, la película se hace entretenida, tirando de gracietas facilonas y bonitos mensajes relacionados con el amor, la amistad o el valor. Hay momentos totalmente prescindibles de lo patéticos e insultantes que resultan (las palizas que propina la vieja humana, por ejemplo), pero estos no empañan demasiado el resultado final si lo que se busca es pasar unos escasos 90 minutos de simple divertimento.

Por tanto, “Madagascar 2” supera bastante a su predecesora, aunque resulta mucho más previsible que aquella. Lamentablemente, se queda muy lejos del nivel mostrado en la genial “Kung Fu Panda, por lo que parece que salvo raras excepciones, Dreamworks sigue encaminada a contentar más a un público infantil que a “todos los públicos” en general.


Lo mejor: los pinguïnos

Lo peor: su acusado infantilismo; sus topicazos.


Valoración personal: Correcta

11 comentarios:

Faraonika dijo...

Tengo muchas ganas de verla. A mí la primera me gustó, la verdad, no me encantó pero era entretenida.
Los pingüinos son la caña!! Y la jirafa hipocondriaca es un personaje muy bueno también.

Yo acabo de regresar de ver "bolt" y es flojilla flojilla.

Un saludo!!;)

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Los pingüinos son lo mejor de esta y de la otra entrega. Excepto la jirafa y la cebra, el resto de personajes son bastante insulsos, incluido el león protagonista.

Bueno, hay otro personajillo diminuto que tiene tb su gracia, aunque aparece más bien poco.

A mí me ha resultado demasiado bobalicona para entusiasmarme.

Saludos ;)

Alejandro the Kitsune-san dijo...

a mi laos dibujos de dreamworks no me gustan nada

solo para vender muñequitos en mc donalds

pixar me guata mas(menos cars)

esta no la veo

saludos

Alejandro the Kitsune-san dijo...

(en vez de guata es gusta)

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Es que Pixar son palabras mayores. De Reamworks salvaría Kung Fu Panda y la primera de Shrek.

Saludos ;)

P.D:.Debo ser de los pocos que Cars sí le gustó.

Chacal dijo...

De este pseudoremake de El Rey León sólo me gustaron los pingüinos. La cosa no sólo se queda lejos de Pixar sino de la propia Dreamworks que con Kung Fu Panda consiguió mejores resultados.

P.D.: Ya puedes sacar cuando quieras lo de los premios Adlo porque por ahi tampoco me ha tocado nada.

Jorge - cinenovedades dijo...

Bueno, al parecer esta segunda entrega por lo que comentas supera bastante a la primera cinta, lo cual ya es todo un aliciente. Por cierto "Kun Fu Panda", realmente genial!
Saludos!

Anónimo dijo...

No soy aficionado a las cintas de animación, aunque reconozco haber disfrutado con algunas de Pixar: Wall-E, Los Increibles, Buscando a Nemo... y, sobre todo, Monstruos SA.
Pero sí tengo algo que agradecer a Madagascar (la 1ª parte -esta 2ª no la he visto-), y es que les encantó a mis dos niñas. La han visto decenas de ocasiones y siguen divirtiéndose con las payasadas de la cebra, el león, la jirafa... Los niños son un público más exigente de lo que a veces creemos, aunque sus gustos, en ocasiones, no tengan nada que ver con los de un adulto.

Saludos

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Chacal,

Después de Kung Fu Panda, creía que Dreamworks había tomado definitivamente un buen rumbo a seguir. Madagascar 2 me demuestra lo contrario.

Jorge,

Es que la priemra...era malilla. Esta es un poco mejor, pero no pasa de ser meramente netretenida.

Almas Oscuras,

Creo que hoy en día los niños no se tragan cualquier cosa, y las ñoñerías ya no les van tanto como a otras generaciones. Si a tus peques les gustó Madagascar, la secuela seguro que tb, pero no es un film para el disfrute de toda la familia. De eso ya se encarga Pixar.

Saludos ;)

Covenant dijo...

Buenas, acabo de descubrir el blog a traves de almas oscurar y lo que llevo leido me gusta y mucho. Ahora te enlazaré.

Con respecto al tema, como otros creo que Pixar esta no uno, sino muchos pasos por delante de Dreamswork. Solo hay que ver los cortos que suelen meter con las pelis para darse cuenta.

DAunque las comparaciones son odiosas, no dejan de ser necesarias. Madagascar esta bien pero se le echa en falta algo, no sabría definirlo, pero ese punto de locura que llevan las de Pixar.

saludos!

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Bienvenido PKDesingz!

Me alegro que te guste el blog y sobretodo te agradezco que me hayas enlazado. Te correspondo de la misma forma, y más viendo que tenemos gustos cinéfilos en común xD

La vedad es que ahora mismo Pixar está a un nivel inalcanzable, y aunque parece que la distancia se acortaba un poquito tras Kung Fu Panda, a Dreamworks aún le queda mucho que aprender. Como bien dices, Madagascar, sin ser mala, aún le falta algo para calar en el espectador.

Saludos ;)