jueves, abril 26, 2007

MEME Cinéfila

Tras un largo parón, vuelvo de nuevo manos a la obra con este mi humilde blog.

Ya sea por pereza o por falta de tiempo, he tenido que relegar el blog a “prioridades secundarias”.


Como novedad, podriamos decir que mi regreso a estos lares viene a petición del compañero blogero Mr. Bristow, que me ha pasado una de estas abundantes MEMEs que circulan hoy en día por la blogosfera. Así que esta vez, nada de crítica cinéfila, aunque por películas vistas en estos últimos día no será.

Bueno, tan solo diré que he visto una de mis películas más pendientes, Million Dollar Baby -del maestro Eastwood- y que me ha encantado. Una película sublime. Excelentes interpretaciones de todo el reparto. Sencillez y nulos efectismos para contar una historia de superación personal, dura y sobretodo, triste.

El sr. Eastwood hace de la historia más tópica, puro cine. Solo hay un motivo para no considerar “Million Dollar Baby” la mejor película de Clint Eastwood como director, y ese motivo es “Sin perdón”, toda una obra maestra.


Y ya, sin más dilaciones, la MEME.


Ésta trata de un listado de películas (de lo más variado, todo hay que decirlo) de la que hay que marcar las que uno haya visto. Teoricamente, el haber visto 80 o más películas de esta lista, viene a decir que no se tiene vida propia. Por supuesto, eso es discutible (por no decir que es una chorrada) y más sabiendo que el cine tiene la virtud de poderse ver en compañía (amigos, familia, pareja sentimental, mascotas...)

De todas formas, el objetivo final de todas las memes es conocer un poco a las personas que lees, como los tests de preguntas chorras que se mandaban antes por e-mail y que seguramente nadie rellenaba ni reenviaba, o almenos yo no lo hacía :P


Pero bueno, estas memes son interesantes si tocan un tema que te fascina, y en este caso me toca el cine, una de mis mayores pasiones.


Ahí va la lista. Además, hago una valoración muy general de lo que me han parecido, por si el sr. Bristow quiere hacerme algún reproche en concretom y darme así un poco de mi propia medicina xD


Ah! Y por si lo dudabais, según esto no tengo vida propia (y de quien será la vida que estoy viviendo?¿)

Leyenda: B = Buena M = Mala R = Regular P = Pasable


Las que he visto se encuentran en color. Algunas, las he visionado por curiosidad, por ganas, por fervor, de casualidad, por error, por desgracia, por obligación y otras bajo los efectos de substancias legales, entre otros motivos.


The Rocky horror picture show (tengo curiosidad por verla)
Grease (B, un clásico)
Piratas del Caribe (B)
Los elegidos
The Mexican (M)
El club de la lucha (R)
Starsky y Hutch (M)
La historia interminable (B)
Sillas de montar calientes (B, divertida y entretenida como bien sabe hacer Mel Brooks)
Aterriza como puedas (B, te partes)
La princesa prometida (B)

El reportero
Napoleon Dynamite (me han hablado bien de ella, así que ya caerá)
Dentro del laberinto(B)
Saw (B)
Saw II (R)

White Noise: Mas allá
La flor del mal
Ejecutivo agresivo (M)
50 primeras citas
Scream (B)
Scream 2 (P)
Scream 3 (M)

Scary Movie (B, de las pocas chorras actuales que me divirtió, sobretodo por el giro final)
Scary Movie 2 (Mala de narices)
Scary Movie 3 (M, pero tiene sus buenos momentos)

American Pie (B, de descojoné en la sala de cine con mis colegas. La he vuelto a ver y sin risas)
American Pie 2 (M, un payasada sin gracia)

American Pie: ¡Menuda boda!
American Pie presenta Band Camp
Harry Potter y la piedra filosofal
Harry Potter y la cámara secreta
Harry Potter y el prisionero de Azkaban (M, un peñazo de aúpa)
Harry Potter y el cáliz de fuego
Resident Evil (P)
Resident Evil 2
El chico ideal
Little black book
El bosque (me contaron el final, así que me la he ahorrado)
Lilo y Stitch
Lilo y Stitch 2
Buscando a Nemo (P, demasiado infantil para mi gusto)
Descubriendo Nunca Jamás
Señales (M, un coñazo)
El Grinch (M)
La matanza de Texas (1978) (B, para la época. Verla ahora puede ser un cachondeo padre)
La matanza de Texas (2004) (P, un correcto remake, a mi parecer)
Dos rubias de pelo en pecho (M, un bodrio, como todo lo que hacen los hermanos Wayans)
El efecto mariposa
El sueño de mi vida
Yo, robot (R, los efectos visuales se zampan la historia)
Cuestión de pelotas
Soldado universal (B, la mejor película de Van Damme, lo que para muchos significará poco, pero para mí no)
Una serie de catastróficas desdichas (R, la falta la chispa del cine “made in Burton”, pero tiene encanto)
Y entonces llegó ella (M, si es la de Aniston y Stiller)
Deep Impact (M, un tostón de cuidado)
Vaya par de idiotas (M)
Nunca me han besado
Los padres de ella (P)
Los padres de él (P)

Ocho noches locas
La sucia historia de Joe Guarro (ni se me ocurriría)
Una cenicienta moderna
La terminal (B)
Lizzie McGuire
Pasaporte a París
Dos tontos muy tontos (M, aunque tiene algún momento conseguido)
Dos tontos muy tontos: Cuando Harry encontró a Lloyd (M, completamente estúpida)
Destino final (B)
Destino final 2 (R)
Destino final 3
Halloween (B)
The Ring (M)
The Ring 2
2 colgaos muy fumaos
Prácticamente magia (M)
Chicago (si no fuera por Don “Gigoló”Gere y la Bridget Jones, la vería)
Ghost Ship (P)
Desde el infierno (R)
Hellboy (B)
La ventana secreta (R)
Yo soy Sam
Falsas apariencias (P)
El día de mañana (P)
Muñeco diabólico (P)
La semilla de Chucky
La novia de Chucky (M, vergüenza deberia darles hacer cosas como esta)
10 razones para odiarte (B, huye en parte de las típicas comedias de instituto. Se pasa un rato agradable)
Recién casados (M, como todo en lo que aparece Aston Kutcher)
Gothika
Pesadilla en Elm Street (B, la única)
Dieciséis velas
Titanes: Hicieron historia
Juego de honor
Bad Boys 2 (P, demasiado larga y ruidosa, pero francamente entretenida)
Nunca juegues con extraños (P, mejor de lo que esperaba gracias a la dirección de Dahl, más que a sus protagonistas)
Se7en (B, el mejor thriller de serial-killer de los noventa)
Ocean's Eleven (P)
Ocean's Twelve
Identity (B)
Lone Star
Al diablo con el diablo (M)
Depredador I (Muy buena, un clasicazo)
Depredador II (B, inferior a la primera y vapuleada injustamente, pero entretenidísima)

Independence Day (B, un divertimento con aire serie B)
Cujo
Una historia del Bronx (Muy buena)
En la oscuridad
Christine (P)
E.T. El extraterrestre (B, queda alguien que no la haya visto? Y a que esperas!)
Los chicos del maiz
La hija de mi jefe
Sucedió en Manhattan
Escalofrío
Best Bet
Cómo perder a un chico en 10 días
Alguien como tú
Las chicas del calendario (R)
Entre copas (pendiente)
Mars Attacks (M)
Horizonte final (M, empeiza bien pero acaba como una burda película de terror-gore)
Por siempre jamás
Forrest Gump (Muy buena)
Golpe en la Pequeña China (Buenísima, de lo mejorcito del maestro Carpenter)
X-Men (B)
X2 (B, superior a la primera)

Spider-Man (M, un bodrio, cutre y con un desfortunado reparto)
Spider-Man 2 (M, más de lo mismo)

Sky High: Una escuela de altos vuelos
Jeepers Creepers (B, de lo mejorcito del género de bajo presupesto de los últimos años)
Jeepers Creepers 2 (P, topa con molestos tópicos, pero se disfruta)

Atrápame si puedes (pendiente)
Los otros (M, un tostón con un buen final que hace que se la sobrevalore, a mi parecer)
Ponte en mi lugar
El imperio del fuego (P, arriesgada, con un buen y original planteamiento desaprovechado)
Crueles intenciones (P)
Crueles intenciones 2
¡Este cuerpo no es el mío! (M, un bodrio)
Fanática
El milagro
Aquellas juergas universitarias (M)
El diario de Noa --> posiblemente Un paseo para Recordar sea mejor...
K-Pax (B)
El señor de los anillos: La comunidad del anillo (P)
El señor de los anillos: Las dos torres (B)
El señor de los anillos: El retorno del rey (B)

Un paseo para recordar (no se cual es. Un paseo por las nubes o Algo que recordar? Puede ser un error en la lista)
Hitch: Especialista en ligues
El quinto elemento (Muy buena)
Star Wars Episodio I: La amenaza fantasma (M, un peñazo)
Star Wars Episodio II: El ataque de los clones (está la pusimos una vez con los amigos y acabamos dejándola de ruido de fondo sin prestarle la más mínima anteción)
Star Wars Episodio III: La venganza de los sith
Star Wars Episodio IV: La guerra de las galaxias (P, toda una revolución, aunque fuese el fin de la ciencia-ficción inteligente y crítica)
Star Wars Episodio V: El imperio contraataca (B)
Star Wars Episodio VI: El retorno del jedi (P)

La tropa de Beverly Hills
El factor sorpresa
Air Force One (M, patriotisma nauseabundo)
A las duras y las maduras (P, divertida)
Trainspotting (lo sé, es un pecado. Me fustigo por ello)
El sótano del miedo
Terciopelo azul
Sonrisas y lágrimas (B)
Tú a Boston y yo a California (P)
Tú a Lodres y yo a California (M)
Los pájaros (B)

Terminator (B)
Terminator 2 (Muy buena)
Terminator 3 (M, un fracaso a todos los niveles)

Empire Records
SLC Punk
¿Conoces a Joe Black? (P)
Pesadilla antes de Navidad (B)
El silencio de los corderos (B)
Sleepy Hollow (B)
Extrañas coincidencias
24 Hour Party People (B)
Sangre por sangre
Thirteen
Manic
American history X (Muy buena)
Deep blue sea (M)
George de la jungla (M, horrible)
Operación Canadá
Big Black Titties
Buen rollito
The Jacket
Mi pequeño pony


Ale! Esto es todo. Y para seguir con la cadena y la supuesta tradición, le paso esta MEME, esencialmente, a Jaume Lorite, HumanAfterAll, Crunch, Rose, Nicktime, Miguel Angel, Faraonika, Octopus, John Trent y quien lo desee, así que si no has sido nombrado, puedes enlazarme tu MEME en un comentario y de buen grado le echaré un vistazo. A los aludidos, espero que me correspondan. Y si no, pues tampoco pasa nada.


Por cierto, a Cinematic le debo una MEME. Espero que sepas perdonarme. Con menor o mayor retraso, de seguro que la publicaré.


Saludos :)



domingo, abril 01, 2007

“Sky Captain y el mundo de mañana” o cuando un capricho sale caro

Atención: Hay algún que otro spoiler.


“Sky Captain..” aterrizó en nuestras pantallas ya hace un tiempo como una propuesta innovadora y original sobre el cine de aventuras. Y en parte, podríamos decir que lo era, aunque tenía más de innovadora en el aspecto técnico que de original en todo lo demás.


Como todo cuento, esto empieza por un: Había una vez...


Había una vez un niño grande llamado Kerry Conran que quiso que su sueño se hiciera realidad y que tras un duro trabajo de 10 años y de realizar en el garaje de su casa un corto de 6 minutos llamado “El mundo de mañana”, logró encandilar a unos productores de Hollywood ávidos de un nuevo revienta taquillas que engrosara sus cuentas bancarias.

De esto modo, el sr. Conran logró financiación (unos 70 millones de dólares) para su ansiado proyecto, un film retrofuturista con robots, portaaviones aéreos, héroes intrépidos, damas hermosas y villanos excéntricos.

Para ello, contó además con un reparto de estrellas hollywoodienses de buena reputación y mejor presencia, que lograra captar la atención del público (por si la estética no lo conseguía). Y como el sr. Conran solo quería trabajar con los mejores, pues se contrató a los genios de la Pixar para encargarse del apartado visual.


Dicho esto, la cosa apuntaba a un peliculón, pero no fue así. Ni la crítica ni el público respondieron como se esperaba.

Como no sé lo que pasa por la cabeza de millones de personas para despreciar un film de estas características, me limitaré a dar mi punto de vista, que ese si lo conozco bien.


Punto 1: El film de Conran bebe de las películas de antaño, concretamente de las películas fantásticas y de aventuras de serie B de los años 30 y 40, así como de los cómics pulp de la época. Encontramos referencias a obras de culto tales como King Kong o El Mundo Perdido, entre otras muchas más.

No obstante, la obsesión de Conran por plasmar todo aquello que admira y fascina en una sola película (error y/o virtud habitual en la ópera prima de muchos directores), hace que el resultado sea un mejunge tan dispar y contradictorio que las continuas referencias de unos se encuentran pisoteadas por las referencias de otros.

Así pues, en un film retrofuturista con robots gigantes de por medio, aparece también una isla plagada de monstruos y seres prehistóricos salidos de la mente del propio Sir. Arthur Conan Doyle, con la excusa barata de ser “un experimento más del malvado Totenkopf” (el antagonista el film). De haber aparecido por ahí el mismísimo Frankenstein, no dudo ni por un momento que la conclusión a la que hubieran llegado los protagonistas sería la misma: un experimento más de Mr. Totenkopf.

Hay tanto guiño, que el film acaba siendo un refrito de detalles de todas aquellas historias sin llegar a concretar en nada y perdiendo el rumbo de la trama en muchos momentos. Y bueno, cuando digo trama lo digo muy ampliamente, porque bien podría ser la sinopsis de un videojuego y no más. Entiéndase mejor en el siguiente punto.


Punto 2: La historia es la consecución de acciones y lugares puestos en línea a los que los protagonistas llegan porque así lo dice en el guión. Una vez más, las conclusiones a las que llegan son de vergüenza ajena.

“Sky Captain...”, más que una película parece un videojuego de plataformas en el que se van superando una serie de obstáculos que van aumentando de dificultad a medida que avanza el metraje.

De hecho, los personajes tienen la misma profundidad (o menos) que un pixelado héroe de la PlayStation. Pero bueno, eso ya es el punto 3 y aún no he acabado con este.

El principio de la película es prometedor, un con aire a film-noir bastante encandilador. Pero eso se desinfla a las primeras de cambio. La historia se va simplificando cada vez más hasta tornarse plana y facilona y sustentada únicamente por espectaculares escenas de batallas aereas (muy gratificantes, eso sí) y poco más.

Hay momentos que a uno parece que le estén tomando el pelo, como cuando después de quedar arrasada la base del Capitán Sky (Jude Law), la compañera periodista de éste encuentra el trozo de mapa que Dex (el amigo y mano derecha de Sky) deja como pista para que sepan donde se encuentra la guardia del malo maloso. Sí claro, y yo voy y me lo creo.

Entre tanta destrucción, resulta paradógico que ese trozo de papel vaya a significar algo. Y de deducir que así es (gracias al garabato en forma de avión que en él hay), asusta la facilidad con la que miran al sitio adecuado y preciso donde se encuentra dicho papelito.

Si eso tengo que tragarmelo sin hacerme preguntas o causarme indignación, vamos apañados.

Parece que el guión lo haya escrito un niño de 5 años. Y ya no lo digo sólo por cosas así, sino por diálogos anodinos que rallan lo absurdo. Sólo algunas gracias de vez en cuando y algún chistecito fácil de turno logran captar nuestro interés por unas conversaciones insustanciales y vacíos.


Punto 3. Pero para vacios, los personajes. Personajes planos y estereotipados al límite que no se desarrollan ni queriendo.

Tenemos al encantador y valiente héroe sin miedo y amigo de sus amigos, interpretado por Jude Law, que en algunos momentos cumple con su cometido pero que en otros deja mucho que desear (como cuando se muestra apenado por el rapto de su amigo Dex...sin comentarios)

Luego tenemos a la intrépida, atractiva y orgullosa periodista, una especie de Lois Lane pero en rubia e interpretada por una Gwyneth Platrow más sosa de lo habitual, lo cual ya es decir mucho. Su personaje hacaba siendo de lo más repelente.

Luego tenemos a Angelina Jolie, que en el póster promocional de la película se le daba un protagonismo que luego en la película no tiene. Su personaje aparece escasos minutos y lo hace para resolverle la papeleta a los protas con una virtuosidad increíble (pues ya podría haber aparecido antes...)

También uno se pregunta que demonios hace un portaaviones de origen inglés en medio del Nepal, por mucha llamada de socorro que el Capitán Sky le haga. De no encontrarse a los alrededores, no dudo que hubieran tardado horas y horas en llegar en esos enormes y lentos portaaviones. Pero eso es lo de menos. Que alguien me diga si el aparatito de morse del avión de Sky está conectado directamente con la señorita Jolie, porque por lo visto así es (tampoco voy a hacerme demasiadas preguntas sobre ello)

En cuanto al resto, tenemos a un Giovanni Ribisi que diría yo que es de lo mejorcito del film, aunque al final de la película aparezca en el momento oportuno y en el lugar exacto con la excusa de que se estaban escapando justo cuando ellos (los protas en peligro) llegaban. Ya claro...

También anda por ahí Bai Ling, en un personaje hecho a la medida de sus limitaciones interpretativas, es decir, un robot. En ese momento, también me hago una pregunta. Como puede ser que en una película plagada de robots arcaicos y de aspecto retro, aparezca un esbelto cyborg de apariencia humana? Toda una revolución tecnológica, no os parece?

Entonces para que construir enormes y lentos robots, si puedes crear un ejército de Terminators?

En fín, otra incongruencia que hay que pasar por alto si no quiere disfrutar de la película.


Eso sí, lo peor llega cuando tenemos al mismísimo Laurence Olivier en pantalla, “caracterizado” como el Dr. Totenkopf. Y os preguntareis como, si ese señor ya no se encuentra en el reino de los vivos. Pues la repsuesta es fácil: aparece de la misma forma que Marlon Brando lo hacía en Superman Returns. Así es, digitalmente. Eso sí, tuve que darme cuenta de ello gracias a los créditos finales, porque durante la película ni me percaté (quizás esté perdiendo facultades)


En definitiva, que Kerry Conran estaba tan cegado por plasmar su sueño con la estética retro y sus referencias al art decó, al cine de serie b, a las historietas pulp y demás cosas, que se olvidó por completa de otorgarle alma al proyecto.

Un bonito y fascinante envoltorio, para una historia plana, vacía y sin alma, con personajes más planos aún que la propia historia y cargados de típicos tópicos.

Diálogos insipidos, incroguencias a montones y guiños a miles, para un film que incluso visualmente no acaba de convecer, porque si bien los diseños y la tecnología retro son notablemente de mi agrado (adoro todo lo retro y pulp que se plante ante mis ojos), el aspecto difuso, a veces casi borroso, y el extraño y casi molesto tratamiento de fotografía, hace que no podamos disfrutar al máximo de lo que estamos viendo. Todo acaba resultando demasiado artificial y parece que no hayan podido superior la linea que separa el cine de una intro de videojuego.


Al sr. Conran le ha pasado lo mismo que a una de las referencias a las que quería imitar.

Su película es como el Styling o cómo la estética está por encima de la funcionalidad.

Lo que podía haber sido una digna sucesora de las películas de antaño o de las más recientes aventuras de Indiana Jones, se queda en un intento interesante, elegante y por momentos agradable que se queda por debajo de las expectativas que ofrecía (y en mi caso, tampoco eran muchas).


A pesar de todos estos puntos en contra aquí relatados, sí la película se ve sin pensar demasiado, sin buscarle la credibilidad, sin importarte lo plano que sea el argumento y dando más importancia a la acción que a los personajes, sin duda puede ser un favorable entretenimiento de domingo por la tarde.


A mí me ha resultado de fácil digestión. Y no dudo que me olvide de ella con la misma facilidad. Tampoco creo que con el tiempo se convierta en un film de referencia o de culto para los aficionados al género.


Lo mejor: la estética y diseños retro que se pueden contemplar; algunas referencias a los clásicos de la serie B; que no se exceda en el metraje.


Lo peor: personajes planos e insustanciales; un guión sin pies ni cabeza (las motivaciones del sr. Totenkopf no quedan muy claras, aunque así lo parezca); un aspecto y desarrollo de la acción más propios de un videojuego que de una película; una cargante e insípida Gwyneth Paltrow, a la que muchos idolatran y a la que a un servidor no le convence lo más mínimo.


Valoración personal: 2,5 sobre 5 (Tan interesante como irregular)


domingo, marzo 25, 2007

“300”, les recordaremos

Brutal, impresionante, sobrecogedora, alucinante, demoledora y un sinfín más de ajetivos que me servirían para calificar la película que en un sólo fin de semana en USA ha conseguido recaudar 71 millones de dólares, consiguiendo así ser la película más taquillera estrenada en un mes de marzo.

Y el mérito no se lo quita nadie.


“300” es una película épica con todos los ingredientes del género: batallas, honor, traición, amistad, amor..., pero rodado de forma adrenalítica, sin apenas respiro para el espectador y con una puesta en escena abrumadora, que consigue dar forma y vida (con absoluta fidelidad) al cómic de Frank Miller.


Snyder no se corta un pelo a la hora de utilizar y abusar de la cámara lenta, de los desmembramientos y decapitaciones y de la testosterona de los espartanos. Y la verdad, en una época tan políticamente correcta como la actual, eso se agradece mucho.

Hasta ahora, ninguna otra película épica había hecho apología de la venganza y de la guerra sin concesiones ni tregua desde que un servidor alucinara tiempo atrás con la excepcional “Conan el bárbaro”.


Snyder, director de la mejor película de zombies de la historia (por mucho que le pese al maestro Romero), ha conseguido hacer de “300” un producto que no solo entretiene, sinó que deja huella (y manchas xD)

Algunos la acusarán de hiperviolenta, pero que importa eso? Esto está hecho para el disfrute y regocijo del personal. Y en mi opinión, eso no le quita muchas de las virtudes que posee a nivel cinematográfico.

Cierto que el guión no da para mucho y en algunos momentos puede resultarnos una historia un tanto vacía, pero ese es el testamento del cómic y hay que respetarlo. Aún así, Snyder le confiere una fuerza arrebatadora y solemne (que ya de por sí tiene la historieta gráfica)


No hay duda de que lo más atractivo del film es su puesta en escena. Si bien no soy muy partidario de la pantallita verde, en este caso no puedo negar que su uso está más que justificado.

De ninguna otra manera se hubiera podido captar al esencia que impregna cada una de las viñetas de Miller.


Es importante destacar también la portentosa banda sonora, que le confiere al film una energía y un vigor brutales. En los momentos más intensos, sea una batalla, un discurso o una lamentación, el espectador se adentra en la atmósfera del film de forma casi inmediata y sin ningún tipo de esfuerzo.

Esa mezcla de tambores, guitarras eléctricas y cantos gregorianos le otorgan el broche de oro a la película.


Mención a parte merecen los actores, en especial un feroz e irreconocible Gerard Butler, que a partir de hoy será recordado, para bien o para mal, como el gran Leónidas, Rey de Esparta.

La verdad es que lo que más miedo me daba era que su interpretación perdiera, en el doblaje al español, la garra que la voz original tiene. Pero por suerte, mis temores se disiparon a los pocos minutos de empezar la película. Si bien es cierto que no se puede igualar al original (el trailer en v.o. es realmente imponente), el actor y doblador catalán Jordi Boixaderas (voz habitual de Russell Crowe y Sean Bean) consigue transmitir de forma más que correcta (correctísima) la personalidad del León de Esparta. Un acierto total (aunque a veces la traducción literal de los diálogos no encaje con le gesticulación del actor)

De hecho, era la voz que un servidor tenía en mente para el posible doblaje. Y casualidad o no, así ha sido. Además, el doblaje del provisional trailer en español que circulaba por youtube hace algunas semanas era verdaderamente desalentador.


Doblaje a parte, Butler se sale y incluso aunque se muestre serio y despiadado, hay en él -en todo momento- sentimientos (buenos y malos) y una sensación de respeto envidiables. Y a eso le añadimos ese toque chulo y burlesco de algunas escenas, que arracan unas buenas carcajadas al espectador, en especial los momentos de vacileo ante el emperador Jerjes (un descojone señores, muy a lo Casino Royale)

Por cierto, Jerjes resulta un tanto ambiguo y eso añadido a un doblaje algo desafortunado, hace que algunos momentos que deberían provocarnos temor, nos provoquen unas risas de infarto. Aquellos que hayan visto la película sabrán a que me refiero.


Por lo demás, todos los actores están notables en su trabajo. Desde mi adorada Lena Heady, que da vida a una mujer fuerte y apasionada (ya tocaba ver un personaje femenino de estas características, sin que parezca una mamarrachada como la grotesca Lara Croft), hasta David Wenham o Vincent Regan (curtidos ya en esto del cine épico), pasando por Dominic West, dando vida al indeseable traidor de turno.


Por lo tanto, todos aquellos que vayan al cine a ver la violenta y sangrienta batalla de las Termópilas, aquellos que vayan predispuestos a disfrutar de un nutrido festín de amputaciones y decapitaciones, aquellos que esperen ver a criaturas dignas de la mismísima tienda de los horrores, solamente puedo decirles que no saldrán defraudados.

Pero aquellos que esperen una lección de historia y una cinta épica como las de antaño, que no se equivoquen de sala, porque para eso ya existe la versión de 1962 de Rudolph Maté, “El león de Esparta”, que nada tiene que ver con la obra de Snyder.

Frank Miller se inspiró en la batalla real, no más. Si a “Gladiator” se lo perdonamos, también podemos perdonárselo de “300”.


Una cosa más, aquellos de estómago sensible o mente muy conservadora, que se abstengan de su visionado, porque seguramente les parecerá denigrante y salvajemente deshonesto e inmoral.


A todos los demás, espero y deseo que les aproveche la cena en el infierno. Yo repetiría con mucho gusto.


Lo mejor: Gerard Butler como Leónidas; la cuidada puesta en escena; los perfeccionados efectos especiales (nótese sobretodo en algunas decapitaciones); la brutal y acorde banda sonora; que los diálogos y la voz en off no nos resulten ridículos y que las interpretacione no nos parezcan sobreactuadas como sí sucedió en Sin City; que sus dos horas se nos hagan cortas.


Lo peor: Que se la considere vacía por tener un guión un tanto flojo y exaltado; que algunos se identifiquen con la cultura espartana (no son precisamente un modelo a seguir); que las elevadas expectativas de algunos les impidan disfrutar de la película; que sus dos horas se nos hagan cortas.


Valoración personal: 4,5 sobre 5 (Muy buena)


Saludos ;)

domingo, marzo 04, 2007

Eclipse Total


Casualidad o no, ayer día del eclipse lunar me dispuse a ver “Dolores Claiborne”, retitulada aquí con el pomposo título de “Eclipse total” (de ser “mortal” hubiese quedado demasiado obvio, supongo).


“Eclipse total” está dirgida por Taylor Hackford (Pactar con el diablo, Ray) y se basa en una novela de Stephen King. Leído esto, uno puede pensar: otra película más de terror/suspense basada en un relato el prolífico escritor. Pues no.

En este caso lo que se nos ofrece es una película de intenso dramatismo con toques de intriga muy bien ejecutados.


No todas las novelas de Stephen King son de terror y queda patente que sabe tocar muy bien otros géneros, como son el suspense y el drama. Lástima que últimamente se dedique a autoplagiarse y escribir refritos de rápido y fácil consumo (con la esperanza de ser llevados al cine y sacarse así unos dólares extra)


Sinopsis extraída de filmaffinity:

Dolores Claiborne (Kathy Bates) es acusada del asesinato de Vera Donovan, la dueña de la casa en la que trabaja como asistenta desde hace más de veinte años. Selena (Jennifer Jason Leigh), la hija de Dolores, vuelve a su pueblo natal para intentar probar la inocencia de su madre, pero allí se tendrán que enfrentar a un implacable detective y a un pasado oscuro.


El inicio de la película es prometedor (con una Kathy Bates muy a lo “Misery”) y ya logra en pocos minutos captar nuestra atención. La duda que se nos crea en estos primeros minutos se mantiene hasta el final, todo ello amenizado con el más inquietante suspense y con unos personajes que se van desarrollando adecuadamente a medida que la trama avanza.


Los trapos sucios del pasado, los secretos y las mentidas confluyen en una borágine de sentimientos que mantienen en vilo al espectador de principio a fin.

Kathy Bates está soberbia en su papel de mujer fuerte y tenaz. Toda una lección de interpretación. Jennifer Jason Leigh (bastante desaparecida últimamente) logra también una interpretación más que convincente como la amargada y depresiva hija de Dolores Claiborne.

Christopher Plummer y David Strathairn conforman los personajes más oscuros y despreciables de la historia (en especial el personaje de Strathairn)


En la historia convergen presente y pasado (mediante flashbacks realmente logrados) de modo que podamos apreciar todos y cada uno de los aspectos básicos que conforman las personalidades de cada uno de los personajes, desde la pérfida Vera Donovan hasta el irritante detective Plummer.


Los flashbacks que nos transportan al pasado destacan principalmente por un muy efectivo trabajo de fotografía. Mientras que el presente se nos presenta de forma fría con tonos grises y azulados, el pasado recoje tonalidades más calidades, ofreciendonos de ésta manera un contraste muy significativo y claramente diferenciador.


También es importante resaltar la música compuesta por Dannfy Elfman, que nos facilita la tarea de sumergirnos en la trama en los momentos más sobrecogedores.


Sin duda, ésta película es un claro ejemplo de buen trabajo en equipo (dirección, guión, interpretación, fotografía y banda sonora) con magníficos resultados.


La tragedia por la que pasan tanto Dolores como su hija Selena y el modo en que ésta afecta y condiciona sus vidas, es sin duda el punto clave de toda la historia y es lo que da profundidad a un film que sin dejar de lado la intriga, consigue transmitirnos la visión de una realidad social que una vez existió y cuyos problemas, de una forma más o menos evidente, siguen estando presentes en la actualidad.

Taylor Hackford mantiene el suspense y el dramatismo en perfecto equilibrio y logra mostrarnos temas tan peliagudos de una forma inteligente y convincente a todos los inveles.


Una película recomendable y cuyo visionado hará o debería hacer reflexionar a más de uno.


Lo mejor: la magistral interpretación de una Kathy Bates pletórica; una trama intrigante y un ritmo llevados con oficio; secundarios competentes y sobretodo creíbles; perfecto desarrollo y evolución de los personajes y de la historia; buen trabajo de fotografía.


Lo peor: que fuera vilmente despreciada en los Oscars de ese año; que apenas nadie se acuerde ella.


Valoración personal: 4 sobre 5 (Buena)







martes, febrero 27, 2007

Sesión Doble: Constantine & The Punisher

Dado que últimamente no dispongo ni del tiempo ni de las ganas suficientes como para comentar todo el cine que veo, he decidido inaugurar hoy una especie de nueva sección, por llamarlo de alguna manera, ya que tampoco tengo el blog debidamente estructurado para tales fines.


Con “Sesión Doble”, pretendo comentar lo más brevemente posible un par de películas cuyo vínculo entre ambas tanto pueda ser el género que tratan, su director o alguien de su reparto (entre otras similitudes que se me puedan ocurrir)

De ésta manera, aprovecho el tiempo y mato dos pájaros de un tiro, sin extenderme demasiado en mis apreciaciones y como un modo de ir generando entradas con mayor rapidez y frecuencia.


Hoy tocan dos adaptaciones de cómic. Ambas bastantes oscuras pero muy distintas entre sí: “Constantine” de Francis Lawrence y “The Punisher” de Jonathan Hensleigh, ambos directores debutando en esto de las superproducciones comiqueras.


Ante todo quiero aclarar que nunca he leído un cómic de ninguno de los dos personajes, por lo que mis opiniones se basan estrictamente en el aspecto cinematográfico, algo que creo que debería hacerse siempre, ya sea el adaptado un cómic, un libro o un videjuego (en especial, este último)


Ale, menos rollo y al meollo.


Constantine


La enésima revisión del bien contra el mal, está vez más personificados de lo habitual. Tampoco es la primera vez que Keanu Reeves se enfrenta al diablo en persona, ya lo hizo en la estupenda “Pactar con el diablo”, aunque de forma bien distinta, claro.


La película tiene una atmósfera bastante adecuada al tema y los efectos especiales son sobradamente competentes, aunque no espectaculares.


El personaje de Reeves es bastante apocalítico y a ratos hace uso de un humor cínico bastante agradecido. No obstante, Reeves sigue actuando con la sobriedad que le caracteriza y eso siempre es un punto en contra en todas sus películas (aunque tampoco es un actor que me moleste demasiado)


Por suerte, tenemos a la preciosa Rachel Weisz dando cuerpo y alma a todo el conjunto. Si bien sus habituales muecas con los ojos como platos pueden molestarle a más de uno, hay que decir que sin su presencia la cosa hubiera sido un suplicio difícil de aguantar.


El inicio de la película es bastante impactante y gratificante y de no haber sido así se hubiera hecho difícil engacharse al film, ya que a largos ratos se hace un poco lenta y aburrida. Por suerte, como su director tampoco quiere ser demasiado trascendental y no deasea tampoco aburirnos en exceso, va intercalando la acción con escenas chulas para el disfrute del público más “exigente”.


Sin duda, lo mejor es cuando ese pedazo de secundario de lujo hace acto de presencia. Sí amigos, me refiero al gran Peter Stormare (mundialmente conocido como John Abruzzi), caracterizado (de forma sútil) como el mismísimo Satanás, en un papel que le viene al pego.


En definitiva, una película con un ritmo algo torpe, un Keanu Reeves soso en el papel de un Neo más atormentado de lo habitual, unos buenos secundarios (no olvidemos a Djimon Hounsou y a Tilda Swintom) y un final un tanto molesto. Con todo ello, una película pasable que nos deja con ganas de ver más y mejores secuelas de las aventurillas de John Constantine.



The Punisher (El Castigador)


Esta película cayó en mis manos por medio de un amigo, ya que de otra forma ni le hubiera echado un vistazo.


La verdad es que fue excesivamente vapuleada por la crítica. Realmente no es tan mala como quieren hacernos creer.

Tiene sus méritos, aunque son pocos y tampoco la convierten en una buena película y mucho me temo, por lo que he leído, que tampoco en una adaptación fiel al cómic (aquí algún lector del blog estoy seguro que podrá informarme debidamente en ese aspecto ;) )


Sin embargo, es bastante superior a truños infumables como “Daredevil”, de eso no hay duda. Y también es mucho mejor que su versión ochentera, protagonizada por aquel entonces por el famoso (es un decir) Dolph Lundgren.

El inicio de la película es innecesariamente largo y ñoño, luego va mejorando un poquito, pero tampoco están los acontecimientos a la altura del personaje


Thomas Jane impone con su hipermusculado físico, pero lo de la interpretación es algo que aún se le resiste. Para haber matado a toda su familia (motivo de su venganza) pues tampoco se le ve muy cabreado/atormentado salvo por el ya cansino y habitual truco del alcoholismo de turno. Personalmente lo encuentro tópico y cargante.

Pero aquí lo peor no es él, sino las chicas florero de turno. La mala es Laura Harring, la tetuda de “Mulholland Drive”, que tiene un cuerpazo de infarto pero es un petardo de actriz, así de claro. Y luego está la modelo Rebecca Romijn Stamos, más famosa por ser uno de los secuaces de Magneto en la saga X-Men. Sin duda, cuando no habla es mejor actriz.


El toque de dramatismo de la película no me lo creo ni harto de vino. Ninguno de los protas, en ese campo, logra convencerme.

Su director, habiendo comprobado eso, decide recurrir a la acción para hacer algo más llevadero el asunto. La verdad es que el guión es un poco flojito también, pero ahí tampoco voy a ir yo con exigencias.


El gran mérito de Hensleigh es rodar la película sin apenas usar efectos especiales generados por ordenador (uno de los pocos es la escena final con la calavera en llamas). Acción a la antigua usanza. En ese aspecto, creo que su director cumple con buena nota rodando las escenas con mucho oficio. A destacar la escena del mariachi, la del ruso y los últimos minutos del film.


Mención especial para John Travolta, haciendo el papel de típico mafioso que hasta nos resulta simpático y que tan bien se le ha dado otras veces (véase “Cara a cara” o “Operación Swordfish”)

Will Patton también anda por ahí, lo cual también es un favor, ya que me parece un actor muy competente.


Lo peor sin duda, son esos vecinos de tiene Frank, una lacra muy significativa del film. Incluirlos en la trama es un suicidio. Con semejante despropósito es imposible hacer una película en condiciones.


Total, que The Punisher no es tan mediocre como la pintan. Tiene buenas escenas, el ritmo más o menos se aguanta y las escenas de acción están llevadas a cabo con oficio. Pero lamentablemente Thomas Jane no es ni de lejos un tipo atormentado que busque justicia a cualquier precio. Es un tio que aún le quedan ganas de salvar damiselas en apuros y hacer bromitas con helados de fresa.

Un producto que podía haber sido más rentable con un actor más adecuado y con guión con menos chorradas y más consistencia. Pasable y olvidable.


A destacar sus títulos de crédito, lo que más me ha gustado. Y la canción del mariachi, mariachi incluído (la reencarnación de Johnny Cash?? Ya quisiera él). Digo mariachi como bien podría decir rockero o tío que canta country, que nadie se me moleste.



Y hasta aquí la primera “Sesión Doble”.

Como podeis comptobar, lo de ser breve me da a mí que aún es una asignatura pendiente que tengo. Que le voy a hacer, cuando me pongo me animo y no se echar el freno. Maldita sea...



Saludos ;)


lunes, febrero 26, 2007

Gala de los Oscars 2007: el triunfo de Marty


Sin duda, el gran triunfador de la gala fue el gran Martin Scorsese, quien por fín ha visto recompensado todo su trabajo llevándose dos de los premios más importantes de la ceremonia , mejor película y mejor director (entre otros dos a mejor guión adaptado y mejor montaje)

El Oscar a mejor película nos piyó un poco por sorpresa (yo apostaba por la idolatrada Babel), pero no hay duda que “Infiltrados” es una película estupenda y tito Marty un gran director y si ha tenido que ser ahora cuando le den su tan ansiado y merecido premio, yo me alegro por él.


Es cierto que Scorsese se ha merecido el Oscar en más de una ocasión y por películas mucho mejores que ésta, pero así funciona la Academia, emmendando los errores cuando no toca.

De hecho, este Oscar es más bien un título honrífico a toda su larga y espléndida trayectoría como director. Scorsese es uno de los grandes de Hollywood y de manos de otros dos grandes de la industria como son (o eran) Francis Ford Coppola y Steven Spielberg (como veis, no cuento a George “papada monumental” Lucas) ha recibido el premio que tanto le ha sido negado.


Habrá quienes se hayan disgustado con este premio, en especial los competidores en dichas candidaturas, pero hay que decir que ya quisieran muchos hacer un remake tan cojonudo como el que ha hecho este señor y saber dirigir de forma tan magistral a un reparto de tales magnitudes. Y es que cualquiera suplicaría por trabajar con este monstruo de la dirección.


En fin, una vez que ya me he desecho en halágos hacia este señor, pasaré a explicar lo más brevemente posible el resto de la gala, vista a través de mis soñolientos ojos (eran las 6.30 de la mañana y aún seguía despierto) y mi habitual punto de vista.


A excepción del caso Marty y alguno más que comentaré a continuación, las sorpresas han sido más bien las justas.

Los Oscars a mejor actor y mejor actriz estaban cantados y evidentemente en caído en las manos de Forest Whitaker (todo un actorazo al que por fin han reconocido su talento) y Helen Mirren (una actriz como la copa de un pino). En el caso de Mirren, que por cierto estaba realmente guapa en la gala, la cosa estaba segura al 99%. De no haberlo ganado, hubiera podido ir a cualquiera de las otras estupendas actrices nominadas. Cuando digo las otras me refiero por supuesto a Meryl Streep (no es ni de lejos su mejor papel, todo sea dicho), Judi Dench (que no pudo asisitir a la entrega) y Kate Winslet (una de las actrices más jóvenes en ser tantas veces nominada al mismo premio). Aún me pregunto que demonios hacía la “Pe(tarda)” al lado de esas fabulosas actrices. Habría que preguntárselo a Iker Giménez :)


Guillermo Del Toro por su parte, recibió uno de los palos más grandes de la noche al no conseguir el premio a la mejor película extranjera, que en este caso se lo llevó la alemana “La vida de los otros” de la que oído muy buenas palabras, así que enhorabuena a su director y guionista Florian Henckel-Donnersmarck (toma nombrecito)

No obstante, el equipo de Del Toro se llevó 3 Oscars correspondientes a las categorias de mejor fotografía, mejor dirección artística y mejor maquillaje. Así que por lo menos, su trabajo se vió de algún modo recompensado.


El Oscar a mejor actor secundario fue a parar a las manos Alan Arkin por su papel en “Miss Little Sunshine”, desbancando al favorito Eddie Murphy (quién si se llevó el Globo de Oro a esa misma categoria). Y el de mejor actriz fue para Jennifer Hudson, quien recogió el premio muy emocionada (no es para menos dado que hasta el momento era una gran desconocida)


En la categoría de mejor película de animación el premio se lo llevaron los pingüinos bailarines de “Happy Feet”. De este modo Pixar perdía ante un rival que arrasó en taquilla durante las navidades pasadas, aunque yo no he podido comprobar si reamente ésta película es mejor que “Cars” (lo dudo)


El premio a mejor guión original lo ganó “Miss Little Sunshine”, que si bien no se llevó las estatuillas en las categorias más importantes, es de elogiar que una película independiente haya consguido dos Oscars compitiendo en una ceremonia con tan ilustres nombres.


El mejor documental estaba claro que sería “Una verdad incómoda”, abalado y publicitado (y también interpretado) por el político y ecologísta Al Gore. Además, también se llevaron el Oscar a mejor canción, algo extraño si tenemos en cuenta que estamos hablando de un documental y que en dicha categoría solo deberían incluirse películas, a mi entender. Pero bueno, ya se sabe que estos de la Academia hacen los que les da la gana.

Eso sí, a los nominados por “Dreamgirls” les sentaría como una patada en el mismísimo trasero (se tuvieron que conformar con el Oscar a mejor sonido). Para más inri, fue su película una de las grandes perdedoras de la noche junto con Babel, que tan sólo pudo llevarse el premio a mejor banda sonora.

Mi conclusión sería ésta: A los que se esfuerzan se les recompensa, a los pretenciosos se les castiga :)


No comentaré el resto de premios porque tampoco hay mucho que decir. Al final de la entrada haré constar el listado con los/as vencedores/as en todas las categorias para que podais hecharle un vistazo rápido al tema.


Para mí, es más importante destacar uno de los mejores y más emotivos momentos de la noche: la entrega del Oscar honorífico al genial/magnífico/extraordinario compositor Ennio Morricone, responsable de algunas de las mejores bandas sonoras de la historia del cine y por el que un servidor siente un profundo respeto y una gran admiración.

Morricone, visiblemente muy emocionado, hizo uso de su lengua materna para expresar su agradecimiento por el premio recibido y fue tito Eastwood (otro gran perdedor de la noche) quien se encargó de hacernos la dudosa traducción simultánea.

Fue uno de los mejores momentos de la noche y junto con Scorsese su nombre fue de los más aplaudidos (el público en pie y todo, increibel-ble)


Por lo demás y ya en líneas más generales, felicitar a Ellen Degeneres por su buen trabajo como presentadora de la gala. Su agradable humor, su saber estar y su natural desparpajo hicieron la velada de lo más amena. Lástima que su aguda labor no fuera recompensada con un mayor protagonismo. Y es que aquí, los verdaderos protagonistas eran los nominados y había que hacerlo notar. De todas maneras, nos regaló algunos momentos realmente divertidos, como el de la foto que le hizo Spielberg junto a Eastwood xDD


También las performances habituales de ésta ceremonia estaban muy conseguidas. Unos bailarines/gimnastas escenifican mediante sus cuerpos y un juego de sombras elementos característicos de algunas reconocidas películas.

La forma de presentar el Oscar al mejor vestuario también fue bastante original.

Quizás lo menos destacable fuera la parte destinada al backstage después de la recogida de premios. No hubiera ido mal una persona más capacitada para dicha tarea.


En definitiva, una gala muy correcta que ha rehusado recurrir a elementos artificiosos y sensacionalistas tan habituales en tales acontecimientos.

Por mi parte, he echado de menos una mayor sofistificación y elegancia por parte de las mujeres que íban haciendo acto de presencia. La verdad es que la mayoría de los vestidos eran horrendos, en especial el de “nuestra” representante (a saber como iba a ser el vestido que teóricamente iba a llevar si no se le hubiera roto a última hora), que debería llevarse el Oscar al mal gusto.


Aquí os dejo la prometida lista. Aquellos que no vieron la gala seguramente se podrán deleitar con los resúmenes pertinenetes de algunas cadenas de tv. En mi caso, una combinación de viejas y nuevas tecnologías (radio e internet) me permitió gozar de la ceremonia en vivo y en directo (aunque con algunos minutos de retraso). Mis ojeras lo atestiguan :)



MEJOR PELÍCULA - “Infiltrados”


MEJOR DIRECTOR – Martin Scorsese por “Infiltrados”


MEJOR ACTOR PRINCIPAL – Forest Whitaker por “El último Rey de Escocia”


MEJOR ACTRIZ PRINCIPAL – Hellen Mirren por “The Queen”


MEJOR ACTOR SECUNDARIO – Alan Arkin por “Pequeña Miss Sunshine”


MEJOR ACTRIZ SECUNDARIA – Jennifer Hudson por “Dreamgirls”


MEJOR PELÍCULA DE ANIMACIÓN – “Happy Feet”


MEJOR PELÍCULA DE HABLA NO INGLESA – “La vida de otros”


MEJOR GUIÓN ORIGINAL - Michael Arnt por “Pequeña Miss Sunshine”


MEJOR GUIÓN ADAPTADO - “Infiltrados”


MEJOR DIRECCIÓN DE FOTOGRAFÍA - Guillermo Navarro por “El laberinto del Fauno”


MEJOR EDICIÓN - Thelma Schoonmaker por “Infiltrados”


MEJOR DIRECCIÓN ARTÍSTICA - “El laberinto del Fauno”


MEJOR DISEÑO DE VESTUARIO - Milena Canonero por “María Antonieta”


MEJOR BANDA SONORA - Gustavo Santaolalla por “Babel”


MEJOR CANCIÓN - I need to wake up por “Una verdad incómoda”


MEJOR MAQUILLAJE - El laberinto del fauno


MEJOR SONIDO - “Dreamgirls”


MEJOR EDICIÓN DE SONIDO - “Cartas desde Iwo Jima”


MEJORES EFECTOS ESPECIALES - “Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto”


MEJOR DOCUMENTAL – “Una verdad incómoda”


MEJOR CORTO DOCUMENTAL - “The blood of Yingzhou district”


MEJOR CORTO DE ANIMACIÓN - “The Danish Poet”


MEJOR CORTOMETRAJE - “West bank Story”


OSCAR HONORÍFICO - “Enio Morricone”



Saludos ;)

domingo, febrero 11, 2007

Ases calientes (Smokin' Aces), era mejor el trailer


Aquí la breve sinopsis de filmaffinity:


El jefe mafioso Primo Sparazza ofrece una generosa recompensa de un millón de dólares a quien liquide a Buddy 'Aces' Israel (Jeremy Piven), un mago de tres al cuarto que va a testificar contra la mafia de Las Vegas. El FBI ve la oportunidad de usar al embaucador para atrapar a Sparazza, y ofrece protección a Aces, al que custodiarán dos agentes (Ryan Reynolds & Ray Liotta) en su refugio de Lake Tahoe. Cuando la comunidad de malhechores presentes, pasados y futuros, se entera del precio de la cabeza de 'Aces', una multitud de cazadores de recompensas, matones, bellas y sensuales sirenas traidoras y mafiosos salen de caza. Con Lake Tahoe como objetivo, la colección de chorizos se lanza a una cómica carrera en su intento de matar a 'Aces' y llevarse el botín...


Después de sorprender a la crítica con “Narc”, un correcto thriller dramático, Carnahan vuelve a la carga con una película de acción al más puro estilo Guy Ritchie pero sin la frescura de éste. El cocktail que Carnahan nos sirve se hace insípido en algunos momentos y disfrutable en otros. La mezcla entre thriller, comedia y acción se hace bastante heterogenia, sin que ninguna de los géneros llegue a brillar con su máximo esplendor.

La presentación de todos y cada uno de los personajes es bastante informal, ya utilizada en otras películas pero bien resuelta. Ni que decir que estos personajes son de lo más estrambóticos y durante la película algunos de ellos hacen gala de sus irritables excentricidades (véase el trío nazi)


Una vez hechas las presentaciones, el ritmo de la película empieza a flaquear bastante. Si bien el principio es bastante rápido (dentro de lo que cabe, teniendo en cuenta que hay muchos personajes), lo que sigue se hace lento y monótono. Carnahan empieza a perder fluidez en la narración de un modo alarmante. Por suerte, y cuando ya empieza uno a creer que está ante una imitación barata de un film de Scorsese, la cosa empieza animarse un poco cuando el variopinto grupo de matones y caza recompensas inicia su plan de caza. En ese momento apenas hay lugar para el descanso de nuestras retinas y la acción se sucede de forma constante y bien equilibrada, alternando momentos de adrenalina pura con secuencias más explicativas.


Sin lugar a dudas, Carnahan se lo pasado bomba rodando la película que el mismo se ha escrito. Pero lo que está claro es que Carnahan no es un Tarantino (ni en lo bueno ni en lo malo), y muchos de los diálogos y situaciones de la película son verdaderamente absurdos y surrealistas. Intenta ser transgresor con lo que cuenta y el modo en que lo cuenta, pero la cosa se queda en un quiero y no puedo.

Momentos como el del niño karateka, la conversación del nazi superviviente y su verdugo o el de la mancha en la chaqueta de cuero, destilan estupidez por todos lados. En esos momentos, un servidor, más que reirse, ponía cara de “pero esto que és!?”. Las buenas escenas se entremezclan con otras que no aportan nada a la trama y que están de relleno para intentar que la espectador piense que lo que está viendo es la ostia de bueno. Pero eso a mí, almenos, no me ha pasado. Por eso pienso que en ese aspecto, a Carnahan se la ido la olla completamente. El asunto se le ha ido un poco de las manos y eso que el guión es francamente provechoso.


Donde Carnahan se luce mejor es en los momentos más trepidantes, donde la acción sucumbe a toda racionalidad (la escena de la motosierra es una prueba de ello). También algunas escenas de tensión, como varias de las que se suceden en un ascensor, están bien logradas. Estas escenas consiguen captar nuestra máxima atención y nos mete de lleno en todo el fregado que se está montando.

Y luego viene cuando realmente empezamos a dudar de las intenciones del director. Porque si hasta el momento todo había sido acción y cachondeo, en los últimos 20 minutos la cosa da un giro drástico y el dramatismo hace acto de presencia.

No es que ese dramatismo se haga molesto, simplemente es que no cuadra demasiado con el ritmo que la película llevaba.

Estos momentos están solventados de forma aceptable (como ya se hizo en Narc) tanto por el buen tratamiento que Carnahan le impregna como por las actuaciones de los actores. Aquí felicito tanto a Jeremy Piven como a Ryan Reynolds, que en su poder están los personajes más elaborados y el deber de sacar a flote toda la función que Carnahan a montado.

En el lado opuesto, tenemos a un obeso y venido a menos Andy García, que está de pena en su papel y pasa a englosar esa lista de buenos actores en horas bajas, en las que figuran nombres tan ilustres como Jeremy Irons, John Malckovich o Christopher Walken. Una pena, la verdad.

Luego está la cantante y “quiero ser actriz” Alicia Keys, que está bastante sosa, lo cual ya era de esperar. Llega un momento que uno se cansa de ver tanto artista musical intentando hacerse un hueco en Hollywood. Mejor que dejen de dar el cante y se dediquen a lo suyo.

Ray Liotta hace lo que puede con su personaje. Tampoco es que los demás personajes están mejor elaborados que el suyo, salvo destacando sus características principales, pero es que de Liotta uno se esperaba algo más.

El resto del elenco está correcto en base a lo que les ha tocado representar. También se agradece, y mucho, que la intervención de Ben Affleck sea más bien anecdótica. Verlo demasiado tiempo en esa jaula de grillos se me hubiera antojado insoportable.


Las sorpresas finales, porque las hay (como en todas las películas que se hacen ahora), están bien introducidas gracias a un guión competente y a no intentar tomar por tonto al espectador, como hacen muchos otros directores. Puede que alguna se viera a venir (almenos para mí), pero no merman el desarrollo de la historia, sinó que le dan un nuevo empuje.



Y hasta aquí mis impresiones. Realmente no se muy bien como valorar esta película. Primero me aburre y luego me distrae. Pero ese entretenimiento también se vuelve confuso cuando el equilibrio entre disparos, sangre, furcias, chistes, tacos, traiciones, persecuciones y lágrimas se va al traste por culpa de situaciones ilógicas, absurdas y sin ningún tipo de fundamento que Carnahan intenta colarnos como si fuera algo genial.


Smokin' Aces puede gustarte si tienes claro que estás contemplando una chorrada descomunal que solamente prentende entretenerte. Pero si buscas el peliculón que creías que se escondía tras el jugoso trailer, lo único que encontrarás será una decepción con mayúsculas.


Carnahan nos ha servido un truco de mágia que juega con la comicidad del espectador. Esa comicidad pende de un hilo muy fino que se puede romper si dicho espectador no se deja embaucar por los malabarismos visuales de los que Carnahan hace gala.


Por cierto, los seguidores de la serie “Perdidos” (no es mi caso) podrán ver a uno de sus actores (Matthew Fox) haciendo un breve y curioso cameo.


Lo mejor: Un guión bien estructurado aunque desaprovechado en su ejecución; unas buenas interpretaciones de Jeremy Piven y Ryan Reynolds; las escenas de acción.


Lo peor: Las situaciones absurdas que no vienen a cuento y que no aportan nada a la trama; el humor que apenas hace gracia salvo momentos puntuales; la pérdida del ritmo narrativo durante la primera mitad de la película.


Valoración personal: 2,5 sobre 5 (Regular)


domingo, febrero 04, 2007

Verano de corrupción, abriendo la caja de Pandora


¿Qué harías si descubrieras que tu vecino es un ex-nazi perteneciente a la antigua S.S.?

Pues eso mismo es lo que nos plantea esta película.


Después de dirigir la magistral “Sospechosos habituales” y antes de enfrascarse en el mundo marveliano de los X-Men, Bryan Singer se encargó de adaptar para la gran pantalla uno de los tantos relatos del gran Stephen King, “Apt Pupil/El alumno aventajado”. Y de que manera señores!


La película nos muestra una serie de sucesos que se van encadenando hasta llegar a eclosionar en un final contundente, como ya sucediera con “Sospechosos habituales”.

Singer dota la película de un aire escabroso sin necesidad de recurrir a efectismos baratos y gratuitos. La escena de las duchas, la de la marcha militar, la escena del gimnasio con la paloma por medio (nada relacionado con John Woo, no temais) o la escena del sótano, son una buena muestra de como Singer nos induce un profundo desasosiego que se apodera de nosotros incluso hasta los créditos finales.


La historia, para ser más concretos, gira entorno a Todd (Brad Renfro), un joven de 16 años -primero de su clase y apasionado por la Historia- que un día descubre que su anciano vecino (Sir Ian McKellen)es un ex-nazi. En vez de mearse en los pantalones, salir pitando a una comisaría u olvidarse del asunto y hacer lo que la mayoría de los adolescentes de su edad hacen, como ligar con chicas, acudir a fiestas y triunfar en el deporte pátrio de la escuela, Todd decide intimar con su enigmático vecino.

Interesado por el tema del Holocausto, Todd decide chantajear al viejo para que le cuente, de primera mano, los sucesos que tuvieron lugar durante esa trágica etapa de la historia, si no quiere ser delatado y acabar en prisión.

El viejo nazi acepta de mala gana. No obstante, Todd no sabe con quien se está enfrentando y como dice el dicho, quien juega con fuego, al final acaba quemándose.


A partir de ese momento, Tood y el viejo, alias Kurt Dussander, inician un duelo de titantes que ríanse ustedes de Wyatt Earp y los Clanton. El juego chantajista al que juegan ambos se convierte un arma de doble filo, también para ambos.


Los momentos más tensos van acompañados por una portentosa banda sonora que realmente nos facilita esa sensación de desasosiego que antes he comentado.

Singer imprime en el film una tonalidad grisacea, marronosa y a veces rojiza, que ayuda a percibir la crueldad de las escenas.


En cuanto a las interpretaciones, ni que decir que el maestro Ian McKellen está espléndido como el viejo nazi, con una mirada penetrante y absolutamente acribilladora. Pero el joven Renfro no se queda corto tampoco, haciendo suyo el personaje con una frialdad y contundencia inusuales en un chico de su edad.

También es agradecida la presencia de Elias Koteas, uno de esos buenos actores tan inmerecidamente desaprovechados en el mundillo hollywodiense. No es este el caso, por supuesto.

Su personaje, aunque breve, es crucial en los acontecimientos finales.

También tenemos a Ross Geller, o mejor dicho, al actor David Schwimmer, interpretando también un papel breve pero que ejerce una importancia muy significativa en el desarrollo de la historia y en su conclusión.


Con todo, una película muy recomendable. Un buen ejemplo de como se debe trasladar una obra de Stephen King al cine. Una cinta sobre el mal más puro y real que existe. Un mal que no proviene de una cinta de video, ni de una casa encantada, ni de un misterioso lago, sinó un mal que se encuentra en nuestro interior. La maldad que el ser humano puede ocultar detrás de la cansada mirada de un viejo o de la inocente mirada de un niño.


Ojalá Singer se dejara ya de superhéroes y siguiera regalándonos películas como éstas, que bien nos hacen falta.


Lo mejor: Las interpretaciones de Sir Ian McKellen y Brad Renfro; la inquietante atmósfera que Singer inprime en cada fotograma; el perfecto clímax que se mantiene desde el primer minuto hasta el final.

Lo peor: El desafortunado mostacho de David Schwimmer, aunque no su interpretación.


Valoración personal: 4 sobre 5

miércoles, enero 31, 2007

Las 5 películas más soporíferas que he visto en un cine


Como hoy no me apetece enrollarme mucho, he decidido hacer honor a ese spot televisivo -de una conocida marca de coches- que nos recuerda que a las personas nos encanta hacer listas.

Así pues, vuelvo a las andadas con una de mis listas de cine que en este caso surge a raíz de una noticia publicada en Prensa.com y que he conocido a través de, si se me permite las confianzas, mis compis de Tublogdecine.es.


Me entero pues, que una pareja alemana se quedó frita (dormida, sobada..) en una sala de cine después de ver una película (“En busca de la felicidad”, aunque creo que eso es lo de menos) quedándose sólos una vez cerradas las puertas del lugar. A las 4 de la madrugada tuvieron que ser sacados por los bomberos y la policía.

Y yo me hago unas preguntas sobre el suceso:

¿no era más fácil localizar a la persona que tuviera o pudiese acceder a las llaves para dejar salir a la pareja en cuestión, sin tener que llamar a los bomeros?

¿tanto sueño tenían, que no se despertaron cuando se encendieron las luces, la gente se levantó y se empezó a oír el murmullo de los espectadores y los ruiditos de pies pisando las palomitas del suelo?

Y ya la última pregunta ¿en Alemania no tienen acomodadores en los cines? Y si los tienen.. ¿habrán despedido ya al que no supo hacer su trabajo ese día?


Total, que he decidido hacer un ránking de las más aburridas, soporíferas, cargantes y en resumidas cuentas, inaguantables películas que he podido “disfrutar” en un cine.

Desgraciadamente, tengo la capacidad innata de no dormirme en una sala de cine (debe ser por lo incómodas que son las dichosas butacas de los cines a los que voy) por muy tostón que sea la película. Así que he tenido que sufrir todos y cada uno de los minutos de las susodichas, a riesgo de sufrir graves lesiones cerebrales (añadidas a las que ya tengo)


Dicho sea de paso, invito y animo a aquellos (pocos) que me leen, a que compartan con un humilde servidor, su propia lista nombrando aquellas películas que les hayan causado una profunda somnolencia.

Sólo cuentan aquellas vistas en cines :)


Mi lista:

  1. Campo de batalla: La tierra (Roger Christian)

  2. Alejandro Magno (Oliver Stone)

  3. El reino de los cielos (Ridley Scott)

  4. Hijos de los hombres (Alfonso Cuarón)

  5. Mimic (Guillermo Del Toro)


Y eso es todo por hoy.


Saludos ;)

lunes, enero 29, 2007

Silent Hill, mucho ruido y pocas nueves

La verdad es que soy bastante reacio a ir al cine a ver adaptaciones de videjuegos, en menor medida, porque no juego a videojuegos y en mayor medida, porque en la mayoría de los casos los resultados son bochornosos (la estela dejada por “Super Mario Bros.” o “Doble Dragon” es muy, muy larga). Y después de ver ésta película, me alegra haberme ahorrado los 6 euros y pico que cuesta la entrada.


La primera ventaja con la que cuento, a mi juicio, es que desconozco totalmente el videjuego, por lo que me ahorro comparaciones absurdas entre el original (videjuego) y la película (cine, absolutamente nada que ver)


Así pues, me dispongo con cierto optimismo a pasar un mal rato ante “una de terror”. Pero para mí sorpresa, eso no ocurre.

Pero vayamos por partes, como diría Jack el Destripador (chistecito fácil, no me odieis por ello...)


De entrada, lo primero y realmente absurdo es la situación que nos lleva al siniestro pueblo que da título al film.

Una sufridora madre que ve como la salud y estabilidad mental de su hija se ven mermadas por las pesadillas de la susodicha y su peligroso sonambulismo (de aquél que te lleva hasta un acantilado y no hacia la esquina de la mesa del comedor, como les pasa a los demás sonámbulos)

Como la niña nombra el pueblo (maldito) de Silent Hill, a la madre no se le ocurre mejor idea que llevarla hasta allí (para que luego alguien se queje de las terapias de shock)


La excusa de diriguirse hasta el pueblo, es algo/bastante forzada, pero siendo una película de terror tampoco le ibamos a pedir peras al olmo. Eso sí, esa no será la única torpeza de la madre durante el transcurso de la película; aunque lo de darle esquinazo a una agente de policía, luego resultará no ser tan mala idea (aunque la agente no opine lo mismo)


Una vez llegados al pueblo, Gans (director también de la, para mí, gratificante “El pacto de los lobos”) nos mete de lleno en el misterio y la supuesta tensión que harán acto de presencia en lo que queda de película. Y es ahí, en ese rápido cambio de rumbo, donde yo encuentro el primer fallo.

Por mucho que la prota' grite y se esfuerce en encontrar a su hija, la empatía con el espectador brilla por su ausencia. Apenas conocemos nada de los personajes, de sus vidas, de sus interrelaciones...por lo que realmente nos importa un bledo la maldita niña y lo que pase con ella y su madre. Lo único que nos importa es saber que demonios pasó en el pueblo y el porque de las extrañas metamorfosis que se van sucediendo.

De ese modo, el pueblo en sí, que viene a ser un (vital) personaje más de historia, se convierte en el protagonista absoluto, ensombreciendo los supuestos personajes protagonistas, cuyo tratamiento es meramente superficial. Por no hablar del personaje de Sean Bean (el padre/esposo), que está ahí como un elemento más del atrezzo.


Pero no todo es malo. Si por algo destaca “Silent Hill”, es por su cuidada estética y por unos efectos especiales de verdadero lujo, obra del talentoso especialista Patrick Tatopoulos (Independence Day, Godzilla, Underworld, etc)

El mundo macabro en el que nos sumergimos poquito a poco cobra una fuerza apabullante que realmente puede sobrecojer al espectador.

Existen, a lo largo del film, momentos muy logrados, como la escena que transcurre en el lavabo con el ente de turno (no contaré más para no destripar nada a nadie) o dos de las escenas finales del film: cuando se encuentra frente la puerta del “mal”; o la masacre final.


Realmente, en el apartado técnico (ambientación, efectos visuales...) no encuentro ninguna pega, es más, me aprece magistral. Lo malo, es que ello no se sustenta con una buena historia ni con un buen desarrollo.

El misterio que hace a uno moderse las uñas y que debería ir esclareciendóse de forma pausada, se nos resuelve de la forma más atropellada y chapucera posible. Todo el cierto encanto que envolvía el film se va al traste cuando ¡SPOILER! la niña maldita nos cuenta enterita toda su historia, como si una voz en off nos estuviera leyendo el catálago (guía, manual o como se llame) del videojuego.

En cuestión de segundos, el misterio se nos revela. Dicho sea de paso, la historia en sí es bastante absurda y no hay por dónde cojerla (que no es lo mismo que no entenderla, aclaro).

Eso me hace pensar si realmente cualquier videjuego puede ser trasladado a la pantalla por el simple hecho de ser un éxito de ventas. Eso sin nombrar las adaptaciones de juegos de lucha, que historia...más bien tienen poco o ninguna.

No se si en este caso, la historia ha sufrido cambios o variaciones respecto al videjuego, pero para mí, como película, no tiene razón de ser.

Si esto fuera un videoclip de Marilyn Manson me levantaría del sillón y aplaudiría con gran entusiasmo, pero como la película que es, me parece un mero ejercicio de excelente virtuosismo visual pero de profundo vacío argumental.

Christophe Gans se preocupa más, como ya he dicho, del aspecto visual, que de la propia (floja) historia.

Por suerte, las interpretaciones son correctas: a Radha Mitchell ya se le daba bien eso de pasarlo mal, sino véase “Pitch Black” (película de la que jamás se debió hacer una secuela...como la que tuvo), dónde su personaje era más inteligente y tenaz. Sean Bean también cumple con su escaso cometido; y es que es una lástima que un actor con su talento -relegado casi siempre a papeles de antagonista- se preste a hacer de chico bueno en la película equivocada. Y Laurie Holden, con un cambio de look sorprendente, hace gala de sus atributos físicos y además nos muestra a una valiente agente de la ley creíble y sobretodo humana (y eso en un agente de la ley, es un milagro)

También es de agrecer que aún siendo una película de terror con el típico pueblo fantasma, tanto director como guionista nos ahorren un montón de tópicos ya manidos en el género, que bien podrían haber tenido su hueco y que nos hubieran entorpecido el suspense surrealista de la película.

Con todo ello y teniendo como referencia otras adaptaciones hechas hasta la fecha, “Silent Hill” se erije como una adaptación ciertamente lograda, pero que como película de terror propiamente dicha, ni asusta ni sorprende. Por lo tanto, a mi no me convence.


Admito que soy muy exigente, pero si la película que me ocupa no tuviera ese halo pretencioso que la recubre, quizás me hubiera resultado más amena.

Christophe Gans ha pegado el bajón al viajar al otro lado del charco, pero aún así, apunta alto. Estaremos a la espera de que le den un buen guión :)


Lo mejor: La magnífica recreación de un mundo macabro y tenebroso de la mano del genial Tatopoulos; ver a Laurie Holden embutida en un sugerente uniforme; algunos logrados momentos de tensión; la (buena) repercusión que pueda tener para futuras adaptaciones de videjuegos (de la que DOA no ha aprendido nada y de la que espero que Paul W.S. Anderson tome nota para hacernos más llevadera su particular versión de “Castlevania”)

Lo peor: Un guión un tanto absurdo y engañoso; un final francamente insulso e inadecuado; ver al bueno de Sean Bean metido en un berenjenal ajeno; las excesivas pretensiones de las hace gala el producto.


Valoración personal: 2,5 sobre 5 (Regular)










domingo, enero 21, 2007

Rocky Balboa, el regreso de un mito

Tras 16 años de ausencia, Rocky/Stallone ha vuelto a subirse al ring para demostrar que aún le quedan golpes que dar y filosofias que enseñar.


La emoción que siente un servidor al estar en una sala de cine escuchando la estupenda composición de Bil Conti en Dolby Surround, no puede ser descrita con palabras. El “Gonna Fly Now” envuelve la sala y en ese preciso instante empiezas a revivir esa nostalgia cinéfila que tenías guardada bajo llave.


Lo primero y más importante, es señalar que “Rocky Balboa” no es una película de boxeo al uso, sino una película sobre un boxeador (o ex-boxeador).

Stallone nos presenta a un viejo Rocky anclado en el pasado, un Rocky que matiene una lucha interior por volver a sentirse bien y dejar de vivir en los recuerdos de una vida que una vez tuvo (su grandes éxitos en el ring, su amada esposa...)

Ahora el sr. Balboa es un tipo de que se encarga de su “ristorante” -cuyo nombre ya nos hace echar una mirada atrás-, de cuidar a sus viejos amigos y que trata de arreglar la fría relación que mantiene con su hijo. Este viejo Rocky, algo abatido, algo cansado, se plantea regresar al ring, aunque no de forma profesional, claro. Necesita volver a pelear, hacer lo que de verdad sabe hacer y lo que de verdad le llena. Y por descontado que tendrá su oportunidad.


Durante el visionado de la película me ha sido imposible no relacionar las similitudes del personaje con su actor. Y es que ambos han vuelto para callar a algunas bocas. Rocky nos demuestra que puede subirse a un ring y pelear con las mismas ganas y la misma rabia de siempre; y Stallone, que puede seguir congregando a sus seguidores a una sala de cine (algo que parecía muy dificil, teniendo en cuenta sus infestas últimas apariciones)

Stallone no será un Eastwood detrás la camara ni será un De Niro delante de ella, pero tiene el honor de firmar con dos nombres propios, Rocky y Rambo, la historia del cine americano, sea para bien o para mal y pese a quien le pese.


Se nota además, que Sly ha hecho esta película con cariño. “Rocky Balboa” conserva el espíritu de su primera aparición en pantalla. Para quien desconozca la historia del potro italiano, puede ver “Rocky” de 1976 y luego seguir con “Rocky Balboa” de 2006, obviando perfectamente sus secuelas intermedias. Y es que si para algo tiene razón de ser esta película, es para dejar a nuestro púgil cinematográfico más famoso como bien se merece: con un grato sentimiento de autosuperación, sin que el odioso orgullo patriotero nos dañe la vista como hicieron sus antecesoras Rocky IV y Rocky V.


Si que es cierto que en algunos momentos se peca de un exceso de moralina, pero eso no empaña el disfrute de una película emotiva, con sentimiento tras cada palabra y tras cada imagen. Dicha emotividad pierde algo de fuerza en los últimos minutos de metraje en donde la adrenalina hace acto de presencia y donde el combate final se convierte en algo intencionadamente memorable.

El sr. Stallone rueda con eficacia el combate final, con un juego de blancos y negros y con los ya manidos flashbacks intercalados entre golpe y golpe.

Algunos incluso hemos echado de menos escuchar el gran “Eye of the tiger”, pero eso se ha visto compensado rememorando escenas como el ascenso por las escaleras del museo de arte (con Punchi incluido), los entrenamientos con Paulie y algún que otro guiño más, que el buen espectador/fan agradecerá, sin duda.


Con “Rocky Balboa”, Stallone se ha quitado esa espina clavada y ha demostrado que a sus 61 años aún puede lucir músculos sin ningún pudor (algo que ya quisiera el Gobernador de California) y que puede codearse en taquilla con magos, héroes de guerra, adolescentes con superpoderes y antiguas civilizaciones.


No estamos ante una gran película pero sí una buena película, con buenas intenciones y menos pretensiones de las que se esperaban. Efectista pero bien resuelta. Fantasiosa pero agradable.

Los minutos se pasan rápido y satisfactoriamente, tanto si eres un fan como si es la primera vez que oyes el nombre de Rocky.


Lo mejor: Un Rocky creíble con el que empatizas desde el primer minuto; una buen combate final; el tratamiento de los momentos álgidos del film sin necesidad de caer en el ridículo; el humor dosificado; el “buen rollito” que inunda todo el film.

Lo peor: Algunos personajes como “Steps”, poco definidos y que aparecen con la misma rapidez con la que desaparecen; la moralina de saldo de algunos momentos; que tuvieramos que sufrir “Rocky V” para poder disfrutar de “Rocky Balboa”.

Puntuación: 3 sobre 5

domingo, diciembre 31, 2006

“Carlito's Way”, atrapado por De Palma


Carlito's Way, o como aquí en España se tituló, “Atrapado por su pasado”, es una excelente película de Brian De Palma y es de obligado visionado para todos los amantes del séptimo arte.


Para empezar, una breve sinopsis para el que desconozca esta imprescindible pieza.

Carlito Brigante es un ex-traficante de heroína que acaba de salir de la cárcel dispuesto a empezar una nueva vida alejada de la delicuencia. Pero ese nuevo camino a seguir no será nada fácil.

El mundo que le rodea ha cambiado pero la violencia, las mafias y el negocio de las drogas siguen estando presentes y siguen acechándole a cada paso que da.

Como bien nos indica su traducción española, Carlito es un tipo atrapado por su pasado. Su lealtad hacia sus amigos y la lealtad de estos hacia él serán su perdición.


Carlito's Way no es solamente una película de mafias o una película sobre una historia de amor, ni siquiera sólo sobre la violencia o el mundo de las drogas; sinó que es una película sobre la lucha que emprende un hombre por alcanzar su sueño y lo amarga que se vuelve esa lucha.

De Palma nos presenta el film de forma contundente mediante el desenlace final de Carlito y, aún así, consigue durante todo el film, tenernos enganchados a la trama sin pestañear.

Sus vertiginosos movimientos de cámara y sus arriesgados planos son marca de la casa y la secuencia de Grand Central Station es una brillante muestra de efectividad tras la cámara.


Un buen guión y un Al Pacino pletórico son, sin duda alguna, las armas con las que cuenta su director para narrarnos una dura historia de supervivencia en esa jungla de asfalto que son los barrios bajos de la década de los 70.

Unos 140 min. aprox. que en nigún momento se nos hacen largos. De Palma aprovecha cada uno de los minutos con los que cuenta para darnos una lección de cine.

Un mundo nefasto plagado de seres despreciables son la muestra evidente de cada uno de los obstáculos que Carlito debe ir superando si quiere convertirse en un nuevo hombre.

Incluso la cara más dulce y tierna de ese mundo, el amor por su amada, son la prueba de vida que Carlito debe superar con éxito.

Ser un ex-traficante, moverse en un mundo de mafias y drogas y llevar un local nocturno llamado “El Paraíso”, no es una tarea nada fácil para un hombre que quiere reformarse, y más si el abogado que te sacó de la cárcel se ha vuelto un mafioso y un cocainómano acabado.

Y ahí radica otro de los puntos fuertes de la película. Un físicamente irreconocible Sean Penn nos deleita con una de sus soberbias interpretaciones.


Violencia, amor, lealtad, traición...una mezcla ensamblada con eficacia y sin que ninguna de las partes pierda su aliciente ni su peso en el desarrollo de la trama.


Una música que nos arrastra al dramatismo y a la emotividad de cada una de las escenas en las que hace acto de presencia.


Si ésta no es la mejor película del mejor De Palma de antaño, es porque ahí están sus “intocables”.

Elegir entre Elliot Ness y cia y el sr. Brigante es muy dificil. Y no nos olvidemos de “El precio del poder”.

A ver cuando recuperamos al mejor De Palma, que parece que nos abandonó hace tiempo.

Recomiendo ésta película a aquellos que les gusten las historias bien contadas y a aquellos que últimamente se pregunten porque una vez se enamoraron del séptimo arte. Quizás viendola, recuperen esos motivos que una vez les llevaron a amar el cine.


Si vale, ha quedado un poco exagerado, pero es que ésta película es del 93 y ahora apenas se hacen excelentes películas como esta. Ahí queda la cosa.


Lo mejor: el brillante pulso de De Palma para contarnos la historia sin perder un ápice de fuerza en ningún momento; las interpretaciones de Al Pacino y Sean Penn; la persecución en Gran Central Station, memorable.


Lo peor: Absolutamente nada.


Puntuación: 5 (sobre 5)